Lomas de Zamora, febrero 26 (AUNO).- El expresidente de Los Andes Oscar Ferreyra criticó duramente a los organismos de seguridad, a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y al gobierno bonaerense por la falta de respaldo en su afán de erradicar la violencia de las tribunas.
“Ni la AFA, ni el gobierno de la Provincia, ni otro estamento de seguridad actúa como debe. Si uno no cuenta con el respaldo del que tiene el poder no se puede dar batalla”, expresó Ferreyra, que renunció este martes a la presidencia del ‘Milrayitas’ tras sufrir un atentado en su casa.
En ese sentido, el exdirigente del club del Sur del Gran Buenos Aires señaló que la negligencia del poder político a la hora de trabajar contra el “caos” de las barras bravas dejan a los dirigentes en una posición de desamparo.
“La AFA y los políticos miran para otro lado, te dejan en una situación de desamparo total. Hace 4 meses que tenemos la cancha clausurada, pero nadie se pone los pantalones para solucionar el problema”, acusó.
Asimismo, Ferreyra manifestó su resignación por la situación conflictiva que hoy preocupa al mundo de Los Andes, y afirmó que cuando el crimen queda impune, la gente no se involucra en las esferas públicas.
“Cuando mandan los delincuentes, el ciudadano común se aleja. Evidentemente no hay que involucrarse. Lo único que hice fue dedicarle tiempo y pasión a un club”, se lamentó.
En busca de recuperar la posibilidad de disputar los partidos como local en el Eduardo Gallardón, Ferreyra ideó un proyecto que autorizaba a dos mil socios identificados a acudir al encuentro, pero a su vez debía elaborar también una lista de derecho de admisión, en la que figuraban varios integrantes de la barra brava.
Éste no es un hecho de violencia aislado en el seno del ‘Milrayitas’: el 12 de febrero las dos facciones de la barra brava, que pugnan por manejar la tribuna, se habían peleado en la puerta del club, y anteriormente la cancha de Los Andes había sido suspendida antes de un cotejo frente a Atlanta en diciembre, por el hallazgo de armas de fuego y cuchillos en las inmediaciones del estadio.
AUNO-26-02-14
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