Las cámaras de comercio de la región advirtieron que la situación económica es “insostenible” en los rubros que no pueden levantar sus persianas por las restricciones de la cuarentena ante el covid-19, por lo que buscan implementar junto a los municipios distintas iniciativas para reactivar la actividad de los negocios zonales.
A más de 45 días que lleva el aislamiento social, preventivo y obligatorio, las actividades que no fueron declaradas como prioritarias perdieron casi la totalidad sus ingresos, y las más relevantes son la indumentaria, el entretenimiento y el bazar, coincidieron desde los organismos.
La secretaria general de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Valentín Alsina y presidente de los jóvenes empresarios de la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (JEFEBA), Daniela González consideró en diálogo con AUNO que esta situación “acelerará un proceso de crisis que viene en desarrollo hace años”.
González reveló que solo el 10 por ciento de los comercios en Valentín Alsina están “completamente operativos” y precisó que los porcentajes de caída de actividad varían según el barrio que se mida, dependiendo del rubro que esté más o menos presente.
“No se debe generalizar en una caída con un porcentaje igualitario. Consideramos que con motivo del stockeo, producto de la cuarentena, la caída de ventas en algunos rubros está demorada, y lo decimos en estos términos porque consideramos que la llamada comúnmente ‘clase media’ se va quedando sin dinero. Por ello, hoy no se puede visualizar una caída significativa de algunos comercios, ya que la imposibilidad de circular por las ciudades favoreció al comercio de barrio”, explicó González.
Según una estadística entre los comerciantes de la zona, el 74 por ciento cree que una vez finalizada la cuarentena “se tardará más de cinco meses en volver a la normalidad” en cuanto a ventas se refiere.
Por su parte, Martín Caño, presidente de la Cámara de Comercio y la Industria del partido de Almirante Brown detalló que en su distrito las ventas “se desplomaron un 80 por ciento», solo contando aquellos rubros que están permitidos para abrir.
“Sin la ayuda del gobierno, muchos comercios y pymes quedarán en el camino, porque se cortó por completo la cadena de pagos y es muy difícil mantener un compromiso tan grande, como lo es tener empleados a cargo. El sector atraviesa una situación extrema, están en riesgos muchos emprendimientos y fuentes de trabajo”, admitió el dirigente.
Cao explicó que resulta muy “aventurado” trazar un pronóstico respecto a cuándo podrá recuperarse la actividad, que podría tardar “un año entero” y aseguró que“ luego de esta situación vivida, habrán cambiado ciertos hábitos y consumos”.
Desde la Cámara de Comercio de Lomas de Zamora, Martín Kahale adelantó que muchos comercios no esenciales no van a poder pagar los sueldos “por falta de caja” ya que se sólo se facturó en el mes un 20 por ciento en comparación a los meses previos. En ese sentido, manifestó que la caída no fue mayor ya que el municipio habilitó a varios comercios para poder operar “por delivery o por la modalidad take away” y eso permitió conservar parte de la masa de operaciones.
Propuestas para paliar la crisis
Una veintena de cámaras bonaerenses de diversos sectores y colegios profesionales nucleadas en la Mesa Institucional Regional (MIR) le solicitó al Gobierno nacional que “aplique medidas de impacto directo” para garantizar la “continuidad” de las empresas que se encuentran “imposibilitadas del cumplimiento de las obligaciones básicas de subsistencia” por la cuarentena.
La Cámara de Comercio de Almirante Brown pidió a la Municipalidad que habilite a una mayor cantidad de negocios para poder operar en la modalidad take away (comida para llevar) o que directamente se les permita abrir y que el ingreso de los clientes sea “de a uno”.
“Queremos que se habiliten a los comercios de ropa para que puedan trabajar en forma de showroom, siempre respetando las medidas de cuidado y distanciamiento social. No vemos mayores impedimentos para que no se logre”, argumentó Cao.
Por su parte, la Cámara de Valentín Alsina lanzó el Registro Único de Valentín Alsina (RUVA) para que “las personas sepan que comercios que están abiertos y que profesionales siguen atendiendo, además de detallar los horarios de atención (distinguiendo el asignado a personas mayores), si realizan pedidos anticipados, si tienen reparto y métodos de pago.
Ese registro, en sólo 48 horas, tuvo más de 60 inscriptos que fueron difundidos en grupos de vecinos, vía mailing y por medios de comunicación local, logrando descentralizar y dar a conocer los negocios activos.
“También tuvimos la oportunidad de dialogar con autoridades municipales y con autoridades que se encuentran en la comisión de crisis para poder realizar las solicitudes respecto a pago de tasas locales, acción en la que aún aguardamos medidas pero estamos convencidos de que se van a tomar”, concluyó González.
Las cámaras de comercio de la provincia han decidido en esta cuarentena abrir las puertas de sus oficinas para poder “ayudar a los comerciante que se encuentre en problemas” y que las mismas “no están cobrando por el asesoramiento prestado”.
AUNO-05-05-20
SO-SAM