Desde el arranque, la paridad quedó establecida en el desarrolló del compromiso. Mucho despliegue físico, marca y entrega por parte de los dos, pero muy poco fútbol.
Así, los jugadores más creativos de ambos equipos —Eduardo Salvio, en Lanús, y Santiago Raymonda, en Banfield— estuvieron muy contenidos y no pudieron hacer aportes significativos.
Hasta que a los 28 minutos del primer tiempo, Sand sacó a relucir su estirpe de goleador una vez más. Fue tras desviar con el pecho un centro de Maximiliano Velázquez y establecer el único tanto del partido.
Un minuto después, Banfield sufrió la expulsión de Maximiliano Bustos. Parecía que con un hombre más en la cancha, el visitante tendría todo a su disposición como para ampliar la ventaja.
Pero “El Taladro” salió dar pelea en el complemento y en los primeros minutos, el uruguayo Sebastián Fernández estrelló un tiro libre en la base del palo del arco que defendía Carlos Bossio.
De esta manera, el equipo de Julio César Falcioni dejaba en claro que no le pesaba estar con diez jugadores. Nicolás Bertolo tuvo otra posibilidad de marcar la igualdad que no pudo capitalizar.
El “Granate” soportó la embestida y en los últimos minutos terminó jugando cada vez más lejos del arco de Bossio y al final festejó. El elenco de Zubeldía ganó el clásico; sigue puntero y esta victoria puede darle el impulso final que necesita para dar otra vuelta olímpica. ¿Se puede pedir más?…
AUNO 23-05-09
NS-LDC
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