Adrogué, noviembre 17 (AUNO).- El camino que recorrió Brown para volver a la Primera B Nacional luego de un paréntesis de un año y medio tuvo de todo: armó un plantel súper competitivo y tuvo un inicio de temporada ideal, pero luego empezaron las dificultades y las dudas que se despejaron en última recta donde coronó el ascenso gracias al agónico gol de Juan Manuel García que sirvió para convertise en el rey de la B Metropolitana.
El equipo de Pablo Vico empezó 2015 con una larga lista de refuerzos que llegó a la institución de Adrogué, entre los que se encontraba el histórico goleador del club, Gastón Grecco, que revolucionó a el pago con su vuelta luego de su paso por Defensores de Belgrano.
El 9 de febrero, una semana antes del inicio del torneo, el club tuvo su primer golpe duro: muerte de Cristian Vico, el hijo del director técnico, producto de un accidente automovilístico producido con ladrones que huían de la policía.
Por eso, el líder y referente del ‘Tricolor’ se perdió el debut con Fénix, de visitante. Tomó las riendas del equipo su ayudante de campo, Fabián Salvatierra, Brown le ganó 2-1 al ‘Cuervo’, y los jugadores le dedicaron el triunfo al ‘Bigotón’.
En la segunda fecha del certamen, el entrenador volvió al banco con un emotivo recibimiento por parte de los hinchas, que le demostraron todo su afecto y le hicieron saber que estaban con él, más que nunca.
De ahí en más, en lo futbolístico, el elenco de Adrogué viviría varias fechas de festejos. En total fueron once fechas que mostraron a un equipo imparable con ocho triunfos y tres empates. Era, por lejos, el mejor de la B Metro, donde marchaba puntero e invicto gracias a la efectividad de sus delanteros Juan Manuel García, Maximiliano Brito y Alejandro Quintana, que rompían las redes de los arcos rivales en cada presentación.
Pero los tiempos felices se cortaron con la derrota ante Almirante Brown que marcó el comienzo de una seguidilla de siete partidos sin poder festejar (cinco caídas y dos igualdades). Sin embargo, cuando parecía no encontrarle la vuelta al torneo, volvió a levantarse y el hincha recuperó la ilusión tras el 2-0 sobre Platense.
A partir de allí sólo perdió dos partidos y protagonizó un intenso mano a mano con Defensores de Belgrano. Sobre el final, con un impresionante sprint se sumó Estudiantes de Buenos Aires a la pelea y la definición del campeonato se tornó emocionante.
Por la fecha 41, Brown recibió a Tristán Suárez. Debía ganar para no llegar al final del campeonato un poco más tranquilo, pero empató sin goles y ya no dependería de sus propias posibilidades para gritar campeón, ya que el ‘Pincha’ de Caseros había logrado retener la punta más allá de su derrota por 2-1 a manos de Barracas Central.
Al término del encuentro con el ‘Lechero’, Vico sostuvo que las chances de ascenso directo estaban “intactas” y avisó: “Estamos vivos”. Y eso que Estudiantes mandaba con 79 puntos, uno más que Brown y Defensores, que acababa de igualar sin goles con Almirante Brown.
Y llegó el día soñado: el cierre del Torneo de la B Metropolitana, con tres clubes que buscaban asegurarse el único ascenso directo a la Primera B Nacional para no tener que pasar por el Reducido.
Estudiantes de Buenos Aires viajó para medirse con Defensores de Belgrano, mientras que Brown visitaba a Deportivo Morón, en el Oeste del Gran Buenos Aires.
En Núñez no se sacaron ventajas y los conducidos por Vico superaron 2-1 a Deportivo Morón gracias al gol agónico de Juan Manuel García en el cuarto minuto del tiempo adicionado.
Un final de película para hacer realidad el sueño de volver a jugar en la Primera B Nacional. Un premio merecido para un equipo que tuvo poco más del 64% de efectividad (23 victorias, 12 empates y 7 derrotas) y que mostró un fútbol de alto vuelo durante gran parte de la temporada.
AUNO 17-11-15
MC-MFV
