Lomas de Zamora, noviembre 20 (AUNO).- Una encuesta realizada por la Fundación Interamericana del Corazón Argentina, demostró que el 41 por ciento de personas que residen en el conurbano bonaerense y en el Gran La Plata se encuentran expuestos al humo de tabaco ajeno en sus lugares de trabajo, mientras que el 61 por ciento está expuesto al humo ajeno en sitios públicos cerrados.
La ley provincial N° 14.381, indica que “todos los espacios cerrados públicos o privados de acceso público deben ser 100 por ciento libres de humo de tabaco”, pero a pesar de su vigencia desde el 2012 la falta de reglamentación impide su total cumplimiento y fiscalización.
El relevamiento realizado en septiembre reflejó que las violaciones a la ley en los espacios laborales son muy frecuentes, especialmente en el sector público donde el 49 por ciento de los trabajadores afirmó estar expuesto al humo de tabaco ajeno, en cambio en el sector privado el porcentaje disminuye a 38 por ciento, informó la fundación a través de un comunicado.
En este sentido, la institución expresó que la situación “implica una discriminación hacia los trabajadores ya que al estar expuestos al humo de cigarrillo, no están garantizadas las condiciones de seguridad laboral”.
También, explicaron que los espacios laborales son “ambientes contaminados por más de 7 mil sustancias químicas presentes en el humo de tabaco, de las cuales 70 de ellas son cancerígenas, como el benceno y el arsénico”.
Marita Pizarro, directora de proyectos, explicó que a partir de los datos arrojados por la investigación, se observa que “la ley se viola con frecuencia, y que la exposición a humo de tabaco ajeno “golpea más fuertemente a los trabajadores”.
Además, indicó que “el poder Ejecutivo tiene el deber de hacer cumplir la ley y por ello es urgente su reglamentación y fiscalización a fin de proteger el derecho de todos los trabajadores”.
Por otra parte, la encuesta indicó que “6 de cada 10 personas” están expuestas al humo de tabaco ajeno en lugares cerrados de acceso público como bares, restaurantes, salas de juego, edificios públicos, universidades, y escuelas, y que “la exposición es mayor en los jóvenes menores de 30 años (68%) que en los mayores de esa edad (58%)”.
En Argentina, alrededor de 6 mil personas no fumadoras mueren cada año como consecuencia de la exposición al humo del cigarrillo de un fumador, y esta exposición aumenta un 30 por ciento el riesgo de sufrir infarto de miocardio, más de un 20 por ciento el riesgo de sufrir cáncer de pulmón y hasta un 70 por ciento el riesgo de cáncer de mama en mujeres jóvenes, entre otros daños.
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