“Honor, valor y hermandad” son los mandamientos de quienes practican Combate Medieval, un deporte que combina técnicas de artes marciales con el uso de armas controladas y protecciones de metal propios de la Edad Media. Está activo en Argentina desde 2012 y por su auge en toda la región se fundó la Alianza de Latinoamericana de Combate Medieval (ALACoM) para impulsar el desarrollo de la disciplina y posicionar a los equipos en la escena mundial.
“Lo queremos hacer profesionalizando cada vez más el deporte, compartiendo conocimiento, dando capacitaciones y organizando cada vez más eventos regionales que den la oportunidad a luchadores en cada vez más competencias”, señaló la secretaria general de esa organización, Mariana Leibinstein.
La presencia argentina de combates internacionales de esa disciplina es un hecho. El conjunto Compagnia del Lobo Negro viajó en julio de este año a Rusia para participar de un certamen a la par de los mejores del mundo. “Trajimos un camión de experiencia”, destacó a AUNO el luchador Alexis Vallejos Guzmán. Ese conocimiento fue compartido con los luchadores de otros clubes que los acompañaron.
“En el último torneo (local) se notaron las tácticas que habíamos visto en otros equipos en Rusia. Eso nos hace mejorar a todos, porque sabemos que los que viajaron reparten lo que aprendieron”, comentó Alexis. Para él y sus compañeros de lucha “la idea es mejorar deportivamente y como personas. Tenemos unos valores en el club que son honor, valor y hermandad. Tres mandamientos que no solo aplicamos en el deporte sino en la vida”.
¿CÓMO ES EL COMBATE MEDIEVAL?
El Combate Medieval es un deporte nacido en Europa del este hace aproximadamente 20 años que está en constante expansión, en especial en países occidentales. En las peleas se usan armas controladas, sin filo, que pueden ser lanzas, hachas, espadas y armas de asta; y protecciones como armaduras, cascos y varios tipos de escudos.
Por ser competitivo posee rigurosos reglamentos de seguridad. Hay regulaciones para el equipamiento de metal, que tiene que cumplir con el peso, las medidas y la concordancia histórica adecuada. “Por ejemplo, no podes usar piernas medievales japonesas con brazos medievales de Italia del sur”, indicó Mariana.
Existen varios tipos de combates. Los duelos son 1 versus 1 en varias modalidades que se diferencian por las armas y escudos a utilizar. Los enfrentamientos grupales pueden ser 3 vs 3, 5 vs 5 o 12 vs 12. Si no poseen la cantidad requerida de luchadores se pueden sumar a “mercenarios”, que son luchadores independientes. En los duelos vence quien obtiene más puntaje en los rounds y en las peleas grupales triunfa el equipo que logra derribar a todos o la mayoría del contrario.
Además, la reglamentación en el campo de combate o “liza” está a cargo de un cuerpo de árbitros denominados Marshalls y sus asistentes. Se encuentran adentro y afuera de la liza para controlar las situaciones. Son quienes marcan los tiempos de cada round, los puntos que se toman en cuenta, qué golpes están prohibidos, entre otras cosas.
Video de “la batalla masiva más grande de la historia” este año en Rusia
Los “padres del deporte” están en Rusia, Ucrania y Polonia. Con el tiempo se sumaron más países europeos. Surgió a partir de los grupos recreacionistas de la Edad Media que realizaban ferias donde había vestimentas, armaduras, comidas o bailes fieles a la temática. En esos eventos se realizaron las primeras exhibiciones de combate.
En Argentina también comenzó a partir del recreacionismo. Hace 12 años algunas personas de ese ámbito vieron por internet que en el viejo continente se hacían competencias profesionales de combate medieval e investigaron sobre todo lo necesario para participar y para reproducirlo.
Era un reducido grupo que vio por YouTube el Battle of Nations, que es como el mundial de este deporte. Se comunicaron a través de correo electrónico con los organizadores, quienes les dieron unas mínimas pautas y les dijeron que los esperarían el próximo año. Así, lograron participar de ese certamen en mayo de 2013 en Francia.
“La primera Selección Argentina de Combate Medieval se preparó viendo videos y organizándose como podían”, contó Mariana a esta agencia.
Video de la primera selección. Argentina vs Italia 2013
En el país al principio solo había tres clubes dedicados al deporte y estaban ubicados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Los pioneros son Valherjes en zona sur, Compagnia del Lobo Negro en zona oeste y C.E.C.M en Capital Federal.
En la actualidad hay más de 20 equipos activos y la mayoría concentrados en el AMBA. Hay casos en que un mismo club tiene más de un equipo de acuerdo a la categoría en la que van a participar. A su vez, en algunas entidades entrenan duelistas independientes.
Sin embargo, aún no existe una federación a nivel nacional debido a que se requiere que haya un mínimo de asociaciones civiles o entidades jurídicas en las que se realice el deporte. “Una vez que cuatro o cinco clubes tengan asociación civil se va a poder conformar una federación”, indicó la titular de ALACoM.
“La intención está, pero la realidad es que lleva mucho tramite y mucho dinero. Es una inversión muy grande que cada club tiene que hacer. Ya de por sí es un deporte costoso”, añadió.
En Argentina se organizaron los primeros equipos para los torneos locales, regionales e internacionales. Luego aparecieron agrupaciones provenientes de Brasil, Chile y más recientemente The choice is clear:. En el resto de Latinoamérica hay cada vez más interés por esta disciplina.
Justamente ALACoM se creó para dar un marco institucional y profesional al combate medieval en la región y a nivel internacional. Es el resultado de las buenas relaciones entre clubes de distintos países que se vincularon con la finalidad de organizar torneos y/o eventos.
¿QUÉ SE SIENTE SER UN LUCHADOR MEDIEVAL?
Alexis Vallejos Guzmán es integrante de Compagnia del Lobo Negro. Tiene 38 años y es licenciado en Producción de Bioimágenes. Conoció el deporte cuando uno de sus compañeros de trabajo se lo presentó por medio de videos en internet y lo invitó a un torneo que se realizó en Pinar de Rocha en 2019. “Fue un camino de ida”, definió a AUNO.
Aseguró que cuando dice por primera vez qué deporte practica la gente se suele sorprender y que después logran entenderlo. Los que más se resisten son los padres y madres, porque “a nadie le gusta ver cómo le pegan a un hijo”.
“Es muy gracioso contarle a alguien por primera vez qué es lo que hacemos o qué es lo hace un conocido que se dedica al combate medieval. Es algo que rompe los esquemas de lo común”, opinó.
También consideró que las familias son “un pilar importante” y que su apoyo es fundamental. Si bien son luchadores profesionales tienen que dedicarse a otros trabajos para solventar los gastos que conlleva practicar el deporte, como el mantenimiento o la compra de las armaduras, los cascos y las armas controladas.
Los entrenamientos se dividen en dos partes. Por un lado, se realiza un acondicionamiento físico de fuerza y de resistencia. Por otro lado, se practican técnicas de combate para la correcta aplicación de fuerza en los modos de derribo y los golpes permitidos. Además, se realizan simulacros de combate real con las protecciones de metal puestas, las cuales pueden llegar a pesar entre 20 a 30 kilos en total.
“Estamos horas con la armadura puesta peleando agotadísimos. Terminamos y lo más probable es que devoremos lo que tengamos a la mano. Lo que nos pongan enfrente lo vamos a erradicar. Depende de la edad y del cuerpo de cada uno la recuperación y la regeneración”, contó.
Como en todo deporte de contacto, cualquier acción ofensiva o defensiva puede derivar en una lesión si es que no se está “bien equipado o bien preparado” en ambos aspectos. El porcentaje de lesiones en la preparación previa a los enfrentamientos es bajo.
Sobre los entrenamientos Alexis reveló: “Usamos palos pesados que simulan el largo del arma que usa uno en un combate y en la punta los revestimos con cinta de plomería para evitar las astillas. En ese sentido estamos bien cuidados”.
En cambio, en los torneos donde “uno sale a defender los colores de su club” si puede haber más probabilidades de lesiones. La exigencia es mayor y el rendimiento debe ser el máximo. De todos modos, no pretenden salir al campo a lastimarse, porque “el lunes hay que levantarse y trabajar todos por igual”.
Sobre la experiencia del equipo en Rusia contó que tanto la recepción como el trato de los anfitriones fueron excelentes: “Llegar al campamento medieval fue una cosa de otro mundo. Era un espacio muy bien recreado. Las carpas, las gradas, la liza, los gazebos y el área de comida eran increíbles. Se notaban los años de planeamiento y puesta en escena”, concluyó.
SSC-AFD
AUNO-26-10-2024