Un proyecto de ley busca regular el funcionamiento de Casas de Partos y Nacimientos en todo el territorio nacional, con el objetivo de promover la «humanización del parto y nacimiento frente a la medicalización e intervención innecesaria y en muchos casos traumática».
Estos espacios, señala la iniciativa, son para partos fisiológicos y de bajo riesgo, con características similares a un hogar, en donde profesionales calificadas/os matriculadas/os, con trabajadores/as especializados en el entorno del nacimiento, brindan cuidados y asistencia a las personas con capacidad de gestar y sus familias o acompañantes, durante la etapa preconcepcional, prenatal, parto y post parto.
La diputada nacional por el Frente de Todos Mónica Macha, autora del proyecto, aseguró en diálogo con AUNO, que quieren «un acompañamiento equilibrado, que priorice la idea del parto fisiológico, porque es una perspectiva que hoy se está perdiendo» y que el proyecto busca recuperar, porque si las condiciones están dadas, consideran, «es el mejor modo de parir”.
Macha explicó que “las casas están pensadas como parte del sistema sanitario, con financiamiento estatal, y tienen que estar en lugares, accesibles, cercanos a los hospitales y con personal de los mismos”.
Sin embargo, la iniciativa recibió fuertes críticas desde la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) porque los médicos aseguran que “nacer fuera de los hospitales, sanatorios o clínicas no es ganar derechos, sino perderlos”, y remarcan que lo que el proyecto de ley pregona “ya está contemplado en las Maternidades Seguras y Centradas en la Familia, que además están equipadas con Salas de Trabajo de Parto, Parto y Recuperación (TPR)”.
Los pediatras insistieron en un comunicado que estos centros previstos en el proyecto de ley carecerán de infraestructura y profesionales con capacidad para realizar cesáreas, reparación de desgarros vaginales altos, cervicales y resolución de muchas otras posibles complicaciones.
Gonzalo Mariani, médico pediatra neonatólogo y miembro de la Comisión Directiva de la SAP, explicó que los problemas que más frecuentemente pueden presentarse en un parto incluyen «progresión inadecuada del trabajo de parto, compromiso del cordón umbilical con alteraciones de la salud fetal secundarias a caídas en la perfusión sanguínea y oxigenación tisular (asfixia perinatal) y sangrado excesivo post parto, sea por falta de contracción del útero o por algún tipo de desgarro”.
“Estamos convencidos de que el énfasis debería estar puesto en trabajar para corregir lo que corresponda en los centros existentes y no crear nuevos que pueden ser riesgosos para la salud y la vida de los recién nacidos”, concluyeron desde la SAP.
Macha subrayó que “estas Casas propician un ambiente distinto a la hora de parir y hasta para el bebé recién nacido, es pensar en un ambiente que tiene más que ver con un hogar, con una asistencia justa y necesaria, con prácticas adecuadas a la situación individual y no como prácticas regulares, casi automáticas que se realizan en las mujeres o personas con capacidades de gestar sin que las necesiten”.
AUNO-04-10-20
MS-SAM