Vecinos de barrios de Monte Grande sur con serias deficiencias en el suministro de red de agua potable concensuaron una serie de obras con la empresa concesionaria del servicio para paliar la situación en que se encuentran desde hace cuatro años.
Los reclamos de las familias de Báfico, Las Colinas, Grande y Parques relacionan la sequía de las napas que abastecen sus bombeadores y pozos con la instalación de bombas extractoras eléctricas que en 2002 hiciera la entonces Aguas Argentinas.
La afirmación de miembros de una comisión vecinal es que esos aparatos extraen agua potable para abastecer viviendas del centro de Monte Grande y varios countrys cercanos.
En una reunión entre habitantes de los barrios damnificados por la falta de agua y representantes de Aysa, concesionaria del servicio, la comisión vecinal presentó un aval con 1500 firmas de adhesiones al proyecto de obras que intentará mejorar la situación en la zona.
Las tareas tendrán dos etapas, comenzarán el 20 de diciembre y se extenderán hasta el año próximo y fueron detalladas por el director de Planeamiento de Aysa, José luis Veis, que también participó de la reunión en el Centro Tradicionalista “El Pial”.
Según el empleado, la primera etapa comenzará la semana próxima y se abastecerá de los pozos que ya están funcionando, y comenzará la obra dentro de una semana. Incluye un trabajo dentro de las calles, Carmen de Areco, Pehuajó, General Alvear, Las Azucenas, Amat, Mercedes, Rodríguez y Junín.
La segunda etapa comenzaría en febrero o marzo de 2007 y consistirá en la construcción de nuevos pozos sobre las calles Alom, Ayacucho, Lavalle y Carmen de Areco, para las cuales comenzaron a realizarce sondeos en siete zonas.
“El agua es un derecho social para todas las personas. Cuidémosla defendámosla como esencial para la vida”, dejó en claro Aníbal Balmaceda, uno de los vecinos miembros de la comisión que apoyó las iniciativas.
Algunos otros puntos del documento exigieron “que se paren todas las bombas de la zona, incluyendo aquella que lleva agua hacia el centro de Monte Grande y fuera del distrito”, la realización de una “red de agua potable y segura de para la zona” y que la empresa se comprometa a “no poner funcionamiento ninguna bomba hasta que no termine toda la red mencionada anteriormente”. No obstante, la empresa rechazó estos pedidos.
Los vecinos demandaron también “la reparación por daños y perjuicios de todos los años que tuvimos problemas con el agua, que el servicio del agua sea gratuito por diez años y que luego de ese periodo se cobre una tarifa social”.
Sin embargo, los representantes de Aysa se excusaron de responder sobre la petición de gratuidad del servicio y una posterior tarifa social.
El texto fue dirigido a la empresa y los funcionarios municipales, “responsables políticos” de haber autorizado la “instalación de un sistema de bombas que si bien soluciona el problema del agua del centro de Monte Grande, nos dejan sin agua a todos los habitantes de los barrios”.
Pese a que durante la reunión hubo consensos, por momentos se vivieron momentos de tensión. “Ellos (los miembros de la concesionaria) sólo quieren dejarnos sin agua, esto es una mentira”, denunció Gabriela Jerasque, vecina del Jagüel.
MES-AFD
