A menos de un mes de su reapertura, desmantelaron la fábrica ex Ran Bat

Los trabajadores denuncian el vaciamiento de la empresa. Ahora permanecen dentro de la fábrica “cuidado sus puestos de trabajo” y reclaman el pago de la última quincena adeudada. La planta había reabierto sus puertas hace menos de un mes luego de un acuerdo con la Provincia.

Antonella Baldi

Los trabajadores de la fábrica de baterías Arcynur de Burzaco denunciaron hoy que la planta fue vaciada y que a lo largo de la mañana empezaron a recibir los telegramas de despidos. La medida afecta a 35 familias que hasta hace menos de un mes encabezaron una lucha en pos de lograr la reactivación de la empresa.

Los empleados apuntan contra la patronal y denunciaron que “se llevaron todo, la maquinaria, todo lo de adentro de las oficinas” y hasta objetos personales como “un equipo de música, una televisión, la mercadería para el almuerzo” y elementos de higiene, enumeró Leonardo Diarte, uno de los desafectados. Por el retiro de sus pertenencias, los trabajadores presentaron una denuncia en la Comisaría 2 de Burzaco.

“Estamos cuidando nuestros puestos de trabajo”, indicó Diarte a AUNO. Para ello, los trabajadores despedidos permanecen dentro de la fábrica y rotan en los turnos correspondientes a sus jornadas. Además, reclaman el pago de la última quincena adeudada.

La fábrica de baterías ex Ran Bat funciona en el Parque Industrial del partido de Almirante Brown y había reabierto sus puertas hace menos de un mes tras un largo período de lucha de sus trabajadores a quienes no permitían el ingreso a la planta. Hoy el personal retoma las protestas para salvaguardar los puestos laborales.

Los trabajadores encontraron hoy la fábrica desmantelada cuando ingresaron en el turno de las 8. En el interior del galpón había una persona que se presentó como “el sereno” y al retirarse dejó las puertas abiertas y las llaves, así los empleados pudieron ingresar a la planta, detalló el referente quien aseguró que “era la primera vez” que veían al sujeto.

Arcynur volvió a producir el 28 de agosto tras haber alcanzado un acuerdo con el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires como respuesta al cese de actividad operativa que había afectado a los empleados. Al igual que la última vez, los dueños no presentaron ninguna explicación ante la repentina decisión de vaciar la fábrica.

“No hay justificativo de nada, de por qué nos están despidiendo. La empresa no presentó quiebra, nada como para poder dar un motivo”, cuestionó Diarte, incluso —agregó— “habíamos tenido una reunión con uno de los dueños y nos dijo que iba a traer plomo, que se iban a empezar a fabricar baterías chicas que no se venían fabricando” para concluir que “fueron todas falsas promesas para dejarnos tranquilos”.

AUNO-25-9-19
AB-SAM

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