Ex militantes de la Juventud Peronista (JP), esposas, hijos y nietos de quienes fueron secuestrados, fusilados y dinamitados en la “Masacre de Pasco”, ocurrida el 21 de marzo de 1975, se reunieron para homenajearlos en el Cementerio de Lomas de Zamora y en sus discursos criticaron fuertemente a la Justicia, que aún no abrió una investigación sobre el caso.
Bajo el sol de las 11 del sábado pasado, unas 40 personas se encontraron con el objetivo de recordar y rendir homenaje a los nueve militantes –-en su mayoría de la JP— que fueron secuestrados, fusilados y dinamitados por Triple A en 1975, un año y tres días antes de que comenzaran los años de plomo en la Argentina.
El impulsor del homenaje fue Hugo Sandoval, ex concejal por la JP en 1975 —durante intendencia de Eduardo Duhalde— comenzó la caminata hacia las tumbas de sus ex compañeros de banca Héctor Lencina, uno de los asesinados, y Cesar Dolinsky, que falleció en 2005; además del ex militante también fusilado, Héctor Flores.
Allí también recordaron al resto de los que fueron secuestrados aquella noche: Aníbal Benítez, Germán Gómez, Eduardo y Alfredo Díaz, Omar Caferatta y su esposa Gladys Martínez y Rubén Bagnina.
Sandoval, en medio de un llanto que no supo contener, fue el primero en recorrer parte de la historia que vivió junto a algunos de ellos y se mostró dolido por “no poder hacer nada” por los que aún están y que “se van con una mano atrás y otra adelante”, haciendo referencia las dificultades que varios ex militantes tienen para conseguir un trabajo y hacer aportes a sus jubilaciones.
Con ese motivo, —y delante del concejal por la Coalición Cívica lomense Rosendo Pedernera, quien asistió al homenaje— exigió a las autoridades municipales que “les den una mano a aquellos que estuvieron en lucha por medio de una ley para que tengan un pasar digno”.
Fue el militante de la JP Néstor “Flaco” Altamirano quien hizo un breve análisis sobre las “pocas posibilidades” que existen para que “reflote” una generación aquella, y también fue quien despertó una serie de acusaciones cruzadas al sentenciar “que hay responsables políticos de esta masacre que están en el PJ de Lomas de Zamora, y algunos se hacen llamar peronistas disidentes”.
“Muchas veces se cae en cuestiones anacrónicas al discutirse temas de la década de 1970”, analizó a modo de respuesta el hijo de Héctor Lencina, Alejandro, y por eso llamó a la “reflexión” a los que se encontraban en el lugar.
Ya, cuando las agujas del reloj pisaban las 14, Sandoval volvió a hacer uso de la palabra y concluyó reiterando el pedido hacia sus compañeros para que “no dejen de lado esta historia, por los que dieron todo sin pedir nada”.
CP-AFD
AUNO-25-03-09
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