Lomas de Zamora, octubre 28 (AUNO).- A un año del fallecimiento del ex presidente Néstor Kirchner, el intendente reelecto de Lanús, Darío Díaz Pérez, le rindió homenaje en el Concejo Deliberante junto a representantes de distintas fuerzas partidarias del distrito. “Él no fue un caudillo, sino uno de los líderes más importantes, además de un gran dirigente. Era un político que unía”, destacó.
Una hora y media después de lo pautado, la antesala de sesiones estaba colmada de funcionarios, vecinos, concejales y representantes de las instituciones más importantes de Lanús. Afuera, bajo un sol radiante, los militantes oficialistas también aguardaban la llegada del intendente.
En una de las paredes, la bandera argentina cubría la placa recordatoria. Cuando el intendente arribó, la concurrencia estalló en un sonoro aplauso que retumbó por toda la antesala.
Díaz Pérez, su esposa, la diputada provincial por el Frente para la Victoria (FpV) Karina Nazabal, y el actual presidente del Concejo Deliberante, José Luis Pallares, quitaron la insignia nacional para descubrir la leyenda: “A un año de la desaparición física del ex presidente de la Nación, hoy lo recordamos por su compromiso con la patria. Para él, nuestro homenaje y reconocimiento”.
“Esta es la casa de la política, donde se saldan las diferencias. En donde somos distintos y confluimos en intereses comunes. Por eso, decidimos poner entre todos una placa a un hombre que produjo una bisagra en la historia argentina”, señaló el jefe comunal a la hora de justificar la elección del lugar en el que se realizó el homenaje.
El componente religioso también estuvo presente. El Padre Alejandro Zelaya bendijo la placa y, en el sermón, pidió que “Argentina pueda trabajar en conjunto más allá de las diferencias políticas”. Luego, propuso un minuto de silencio.
“Néstor (Kirchner) le arrebató la política a las corporaciones y se la devolvió al pueblo.” Con esa frase, el senador provincial electo Pallares inició su discurso, mientras el intendente y su esposa, vestidos de luto, se mostraban cabizbajos y meditabundos.
Durante su alocución, resaltó el hecho histórico que significó la condena a 18 represores de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), dictada el miércoles pasado, y aludió también al momento en que Kirchner ordenó retirar el cuadro del dictador Jorge Rafael Videla del Colegio Militar de la Nación.
Pallares, en diálogo con AUNO, contó: “Cuando en febrero de 2003 lanzó su candidatura, lo hizo en Lanús. Nos juntó para la organización del acto y lo vimos entrar con la camisa fuera del pantalón, desarreglado, con una actitud muy relajada. Nos miró y nos dijo: ‘¿Esto se lo van a tomar en serio? Si no están convencidos no lo hagan, pero yo, igual, voy a ser presidente’”.
También destacó sobre la personalidad del ex mandatario. “Su pasión era la política y dio su vida por esa pasión. Dignificó la militancia, y eso es algo que le reconocen tanto los oficialistas como los opositores.”
A su turno, Díaz Pérez hizo referencia a la década de los ’90, época en la cual los políticos “sentían vergüenza” de ser concejales y remarcó que la democracia de ese momento era “puramente formal”. “Kirchner, en cambio, puso en práctica una democracia real”, remarcó.
Tras un año sin el santacruceño, el jefe comunal destacó la gestión de la Presidenta, Cristina Fernández, porque “profundizó el modelo e impulsó el regreso de los jóvenes a la política”.
Por último, en relación al ex presidente, acotó que “la crueldad de su sinceridad” era lo que más le gustaba de su personalidad. “Él confrontaba permanentemente con el poder, porque entendía que el poder económico-político era lo que le hacía daño a Argentina”, puntualizó.
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