Flavio Segovia fue uno de los pilares del equipo campeón de Reserva. Con su seguridad y solvencia, el defensor juvenil supo ganarse un lugar en el plantel de Primera que conduce Julio César Falcioni, y por eso hace poco más de una semana realiza la pretemporada con el resto de sus compañeros en el Complejo Apand, de Mar del Plata.
Según comenta, vive “uno de los momentos más felices en su carrera”, aunque no hace falta escucharlo porque se le nota en la enorme sonrisa que lleva en la cara, ya que sabe que consiguió “una oportunidad que no se encuentra todos los días”. Y por ello se esfuerza en cada entrenamiento para ganarse un lugar y tener la posibilidad de sumar sus primeros minutos en cancha durante el próximo Apertura.
“Ese es el objetivo más grande para este segundo semestre”, remarca la joven promesa, de 20 años, en una charla con AUNO, en la que cuenta sus impresiones tras ocho prácticas con la Primera del “Taladro” y comenta sus principales expectativas acerca de lo que se viene.
—¿Te imaginabas que podías conseguir esta posibilidad algunos meses atrás, cuando parecía que ninguno de tus compañeros de Reserva tenía lugar en Primera?
—No, porque es verdad que se abren pocos lugares para subir a Primera. Y si bien Falcioni o alguno de sus ayudantes siempre nos están viendo o siguiendo de cerca para ver cómo andamos todos, Banfield tiene una base de jugadores muy estable y eso hace muy difícil pensar que se puede conseguir un lugar aunque sea en el banco. Pero por suerte se dio y ahora estoy dando el máximo para quedarme entrenando con este plantel.
—¿Y hasta ahora, qué sensaciones te quedan de las primeras prácticas en Mar del Plata?
—La verdad que estoy disfrutando mucho. Sé que tengo que aprovechar esta oportunidad porque no se vive todos los días, pero espero repetir esta experiencia con la Primera durante varios años.
—¿Cuánto te ayudó formar parte del equipo campeón de Reserva para que se fijen en vos desde el cuerpo técnico de Falcioni?
—Creo que bastante. Raúl Wensel siempre nos dijo que la gente, los dirigentes y los entrenadores miran mucho a la Reserva. Por suerte se dio un campeonato y eso nos dio un plus a algunos chicos como Federico (Sardella) y Facundo (Ferreyra), que conseguimos la posibilidad de que Falcioni nos tuviera en cuenta.
—¿Recibiste algún consejo de Wensel?
—Siempre que puedo hablo con él y con Pico Hernández. Antes de venir a Mar del Plata charlé con los dos y me aconsejaron que tengo que entrenarme y adaptarme porque no es una oportunidad que se da todos los días. Aparte es el resultado de varios años de trabajo.
—Por eso me imagino que se te vienen a la cabeza mucho recuerdos de tus años en el club…
—Tal cual, uno recuerda algunos momentos como cuando vine a probarme a Banfield hace ocho años, o varios amigos que fueron quedando en el camino. Y cada una de esas cosas hacen valer mucho más este momento, que es muy importante en la vida de todo jugador.
—¿En qué aspectos pensás que fuiste mejorando para llegar a ganarte un lugar en Primera?
—Creo que con el correr de los partidos en las diferentes divisiones, uno va ganando orden y seguridad, algo fundamental en un puesto como el mío, de defensor. Además la concentración es muy importante, seguida del esfuerzo para buscar hacer las cosas cada vez mejor, y en cada uno de estas cuestiones me voy esforzando en cada entrenamiento para llegar a ser un jugador más completo, y de a poco creo que lo voy logrando. Aunque me falta.
—¿Qué creés que te falta?
—No sé puntualmente si es que me faltan algunos conceptos o características. Pero lo cierto es que en Primera no se pueden cometer errores, y creo que hasta que no juegue mis primeros partidos no voy a conseguir esa seguridad para sentirme un defensor completo y afianzado.
—¿Y a quién tenés como referente o a quién caracterizas como un defensor completo?
—La verdad que no me gusta mucho fijarme en los demás, pero tengo como ídolo a Roberto Ayala. De todas formas, creo que no es lo mejor imitar, si tengo que dejar una huella busco que sea la mía.
NS-AFD
AUNO-22-07-09
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