El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, abordó las lógicas del orden social dominante, en búsqueda de descifrar por qué es tan difícil cambiar el mundo y por qué el sentido común_ es un factor vital para ello.
Linera disertó ayer en el panel de Filosofía y Ética en la Ciencia del Congreso Nacional de Filosofía de la UNLa, donde explicó “¿por qué es tan difícil cambiar al mundo?” y “¿por qué el orden de opresión social se reproduce constantemente?”.
Para ello, el mandatario abordó las lógicas del sentido común, el concepto de hegemonía y la historia de las revoluciones.
Para descifrar el sentido común
“Propongo buscar la respuesta en el acople entre las estructuras objetivas de dominación y las estructuras mentales de la acción. Entre las probabilidades objetivas de las personas y las expectativas subjetivas del sujeto”, planteó García Linera.
La propuesta fue escuchada por docentes y estudiantes, y varios de la colectividad boliviana de la Argentina. Cuando fue recibido por la rectora de la UNLa, Ana Jaramillo, el público estalló en aplausos, más aún cuando el vicepresidente fue distinguido con el título de profesor honorario. Sin embargo, durante la conferencia hubo un silencio respetuoso.
García Linera explicó qué es el sentido común, y analizó los factores que participan en su construcción: “Lo que sucede ahora se inculca, por ejemplo, en la familia y a la larga uno acepta el lugar impuesto en el mundo”, y destacó que las instituciones “tienen la capacidad de proyectar no sólo lo que las cosas son, sino lo que quieren que sean”.
Definió al sentido común como “el conjunto de criterios, razones lógicas, juicios y prejuicios absolutamente evidentes que no necesitan filtro reflexivo previo con los cuales las personas absorben el mundo inmediato, se ubican en él, lo juzgan y actúan”.
El sentido común dominante
García Linera explicó que esta construcción del sentido común trae consigo al sentido común dominante, que es el que incorpora las relaciones desiguales de género, clase y región, perpetrándolas. Así se crea lo que el mandatario definió como “la estructura del mundo objetivo”.
“Cuando alguien no logra el acople entre el mundo subjetivo y el objetivo lo califican de loco”, aseguró el intelectual boliviano, y explicó que *el sentido común dominante también se encarga de “ordenar la jerarquía y las premisas de los sentidos comunes de clase dominadora y dominada*”.
Por otra parte, García Linera definió algunos componentes que posee el sentido común, los cuales son “el modo de conocer el mundo inmediato”, “el modo de juzgarlo”, “la elección de medios para tener determinados fines” y el “modo de actuar en el mundo cotidiano”, todas estas variables, según el mandatario, están controladas por “los conservadores del orden social dominante”.
Entonces, ¿cómo cambiar el mundo?
“Hay momentos en donde el orden social dominante se quiebra parcialmente, y ahí es cuando ocurren las revoluciones”, explicó García Linera, aunque señaló que no hay “un conjunto de pasos lógicos para saber cuándo se sublevarán las clases dominadas”, y puso como ejemplo la revolución bolchevique al recordar que “un mes antes de que sucediera, Lenin había escrito que no pensaba ver en vida la revolución”.
Insistió en que “durante el quiebre se debilita el sentido común dominante, y ahí puede actuar la transformación social. De esa manera, la hegemonía (en el sentido gramsciano) sufre una transformación importante que permite el cambio de la estructura objetiva del mundo”.
“Un proceso revolucionario perdurará si es capaz de transformar el sentido común”, afirmó el disertante y añadió que de no ser así el control lo toman “los procesos restauradores”, puesto que el sentido común arcaico “nunca se va del todo”.
Luego de la exposición el vicepresidente fue honrado por veteranos de la Guerra de Malvinas y familiares de tripulantes del Submarino Ara San Juan, en medio de aplausos.
Foto: Consulado de Bolivia
AUNO-05-04-19
EB-HRC-SAM
