A pesar del revés político que sufrieron en la Legislatura Porteña en los últimos días de 2005, cuando se aprobó una ley que les quitaba la propiedad del establecimiento que explotaban desde hacía dos años y medio, los trabajadores del Hotel Bauen no se resignan. A ahora tienen una nueva posibilidad de asegurar la fuente laboral de los 144 integrantes de su cooperativa. Es que el Poder Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires, ejercido en forma interina por vicejefe de Gobierno, Jorge Telerman, decidió vetar parcialmente la resolución dictada por el Poder Legislativo y enviar un nuevo proyecto que será tratado después del 1 de marzo, fecha de inicio del período ordinario de sesiones.
Aunque esta iniciativa tampoco les garantiza la pretendida expropiación definitiva, que los trabajadores reclaman, la nueva instancia permitiría que los integrantes de la cooperativa tengan más tiempo para conseguir su objetivo. El proyecto que será enviado desde el Poder Ejecutivo asegurara la fuente de trabajo para todos los integrantes de la cooperativa del Bauen y establece un espacio de negociación con la firma Solari S.A, antigua propietaria del hotel.
“No es lo que deseamos pero es mejor que nada. Son pasos adelante que vamos ganando, en definitiva se trata de tiempo, de patear la pelota para adelante, pero sabemos que la verdadera solución que nosotros queremos todavía está lejos. Pero bueno, en definitiva se trata de un avance”, señaló a AUNO-Tercer Sector Gabriel Quevedo, uno de los integrantes de la Cooperativa.
En diciembre pasado, la Legislatura porteña aprobó un proyecto de ley del diputado macrista Eduardo Morando, que consistía en la devolución de las instalaciones del Bauen a sus antiguos propietarios, la familia Yurkovich, que se comprometía a respetar los puestos laborales de tan solo 20 personas, los últimos empleados que quedaron en el hotel cuando se produjo la quiebra, a mediados de 2003.
Pese al rechazo de los trabajadores y de varias organizaciones sociales, el proyecto de Morando fue sancionado. Sin embargo, los miembros de la cooperativa no vieron esto como una derrota definitiva y lograron que en enero el Ejecutivo de la ciudad e comprometiera a vetar parcialmente la iniciativa, para que se trate de nuevo. La intención de los trabajadores es continuar movilizados y recurrir en última instancia a la justicia, hasta lograr la expropiación del Bauen.
Y es que en la causa judicial que se sigue como consecuencia de la quiebra de la firma propietaria del hotel reside la posibilidad de ganar la batalla que los trabajadores buscan. El origen del proceso de cierre del hotel que administraba la familia Yurkovich se originó en un crédito impago que en el año 1978 le concedió el Banco Nacional de Desarrollo (BANADE). Sin embargo, los entonces propietarios dejaron de pagar y entablaron un juicio contra al entidad bancaria, por considerar que se les cobraban tasas usurarias. El BANADE ya no existe. Quebró y hoy es administrado por un organismo residual que estima que la deuda del grupo Solari aún existe y eso les impediría retomar la propiedad del hotel. Algo que los trabajadores piensan utilizar en su favor cuando la Legislatura porteña vuelva a debatir la situación del Bauen este año.
“Lo que buscamos es un compromiso político pero de parte del gobierno nacional. Hace años que junto con las empresas recuperadas peleamos por una ley de expropiación que nos asegure la propiedad de los que ganamos en todo este tiempo. Esa es, en definitiva la pelea de fondo que estamos dando”, sintetizó Quevedo.
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