Lomas de Zamora, septiembre 18 (AUNO).- “Aparición con vida ya de Jorge Julio López.” Esa fue la consigna que reunió a organizaciones políticas de izquierda y de derechos humanos en la plaza Congreso. La intensa lluvia impidió que los manifestantes se trasladaran a Plaza de Mayo como estaba planeado, pero no logró evitar que se callara el pedido de justicia para el testigo clave del juicio al represor Miguel Etchecolatz, que ya lleva seis años desaparecido.
Avenida Rivadavia comenzó a poblarse a las 17.30. Las puertas de la Cámara de Diputados se rodearon de banderas del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), el Nuevo MÁS, Proyecto Sur, el Partido Obrero y la juventud de Izquierda Socialista. “Juicio y castigo a los responsables”, “Basta de persecución y asesinatos de los luchadores populares”, fueron otras demandas que se escucharon durante la jornada.
Mientras tanto, La Plata también le rindió su homenaje. El punto de partida fue Plaza Moreno, ubicada frente a la catedral. Desde allí, organizaciones como Ex Detenidos Desaparecidos y Encuentro Memoria, Verdad y Justicia marcharon hasta Plaza San Martín, frente a la Gobernación, donde se realizó el acto principal.
Ese distrito tiene una simbología especial para el caso de López. A los tribunales de esa ciudad se dirigía el 18 de septiembre de 2006 para escuchar los alegatos del juicio que condenó a prisión perpetua a Etchecolatz. Por ello, fue homenajeado con el título de ciudadano ilustre y existe el proyecto para que el Salón Dorado de la Municipalidad lleve su nombre. Pero él aún no aparece.
La investigación por su desaparición está a cargo el juez Manuel Blanco. En 2008 se creó una Unidad Especial para buscarlo, pero no hubo resultados. Al respecto, la abogada de López, Myriam Bregman, recriminó que “es una causa llena de pruebas, pero también de encubrimiento”.
Asimismo, Nilda Eloy, integrante de la Asociación de ex Detenidos y Desaparecidos de La Plata y ex compañera de militancia de López, cuestionó que no se hubiese hecho “lo que correspondía, como por ejemplo pensar a quién le podría beneficiar” su ausencia.
El pedido de “Basta de silencio, encubrimiento e impunidad” también llegó al interior del país. En la capital cordobesa, organizaciones de derechos humanos y militantes del PTS se movilizaron por las avenidas General Paz y Colón en reclamo no sólo por López, sino también por “el avance en todas las causas judiciales por delitos de lesa humanidad”.
Jorge Julio López ya había estado detenido durante dos años y medio en la dictadura cívico-militar de 1976. Pero su última desaparición es la que realmente alarma, porque significó que parte del modus operandi del aparato represor de esa época siguió con sus operaciones, y porque todavía es necesario seguir con la lucha para conseguir el “Nunca Más”.
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AUNO-18-09-12
