Lomas de Zamora, setiembre 10 (AUNO) – “Otra vez el vaso de la leche se hará puro vinagre”, versifica Luis Alberto Quesada, un poeta de Lomas de Zamora prácticamente olvidado, que estuvo en las filas republicanas contra la dictadura franquista.
Esos versos aluden a la dictadura pinochetista que había irrumpido el 11 de setiembre de 1973 para derrocar al gobierno constitucional de Salvador Allende. Se cumplen cuarenta y tres años de ese golpe de Estado.
Quesada nació en Lomas de Zamora el 22 de agosto de 1919. La madre y el padre eran españoles, que regresan a su país, cuando el futuro poeta tenía apenas tres años.
Cuando el franquismo da el golpe de Estado y estalla la guerra, se anota en el sector Republicano, después es encarcelado y tras varias décadas regresa a la Argentina.
Ya reside en Buenos Aires, cuando se produce el golpe contra Allende. Versifica a raíz de ese violento hecho: “Otra vez ensuciaron el suelo / Otra vez lo rebajaron todo / Otra vez arrasaron la Patria americana / El humo de las vigas, / los retratos caídos y las paredes rotas (…) Un hombre que dispara / Su fusil metralleta / Con un grito en los labios: / ¡Chile no se rinde, carajo!”.
Canta historia y dice sobre el país con Pinochet: “Chile de fusiladas cordilleras / ¡Qué parecido a España! / Hay sangre en los caminos, / En las paredes, en las copas de América / Baja la sangre, en un río de alertas, / Hacia el mar de los pueblos / Otra vez el vaso de la leche / Se hará puro vinagre (…)”.
Escribió entre otros los libros de cuentos La saca, Vida, memoria y sueños, y de poemas El hombre colectivo y Espigas al viento. Se trata de esa literatura en cuya trama está la visión de mundo y la ficción entreveradas, para configurar densidad vital.
Ingresó muy joven las filas antifranquistas y después pasó a Francia donde combatió alineado con la resistencia al nazismo.
Quesada después de salir de España se instaló en su casa de Hipólito Irigoyen, en Caballito, Ciudad de Buenos Aires. Su nacionalidad española y argentina le valió para que en 1959 la dictadura franquista le conmutara la pena de treinta años por la de extrañamiento perpetuo. Se fue a la guerra con dieciséis años y salió de la última trinchera a los cuarenta.
La trayectoria del lomense Quesada fue reconocida en 1999 cuando fue declarado “ciudadano ilustre” por parte del Gobierno porteño.
De firmes convicciones políticas y combatiente en dos guerras, Quesada falleció el 12 de diciembre del año pasado y fue velado en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires.
Bibliografía
Luis Alberto Quesada, ‘Tierra de Chile’, El último hombre colectivo, Buenos Aires, Adunar, 1974.
César G. Calero, Luis Alberto Quesada. El último hombre colectivo, revista digital fronterad.com, 20-06-2013.
AUNO 10-09-16
HRC