Lomas de Zamora, marzo 15 (AUNO).- Si bien todos los triunfos permiten cosechar tres puntos, hay algunos que tienen valor agregado. Algunas victorias levantan la autoestima de cualquier plantel. Lo inverso ocurre con las derrotas. Ciertas caídas derrumban la fortaleza anímica de cualquier equipo. Y ese padecimiento lo acusan en su juego en las fechas sucesivas.
Lanús es el ejemplo concreto de la conclusión del párrafo anterior. Luego de perder en su visita a Banfield (2-1), en una nueva edición del Clásico del Sur, debía recibir a Gimnasia y Esgrima La Plata en el marco de la quinta fecha del Torneo Clausura. Ante un elenco platense con la urgencia de robustecer su flojo promedio, el ‘Granate’ tenía la chance de dejar atrás la derrota frente al ‘Taladro’.
Pero el conjunto que dirige Gabriel Schurrer sintió el golpe de la jornada pasada e igualó sin tantos en Guidi y Arias. “No pudimos demostrar nuestro juego en ningún momento. Perdimos siempre en las pelotas divididas y sufrimos el trámite del partido más de lo que pensábamos”, señaló el mediocampista Diego González en diálogo con AUNO.
Con poca lucidez para hallar los caminos al gol, y sin la posibilidad de desnivelar de la mano de las figuras de Diego Valeri y del uruguayo Mario Regueiro, el equipo de la zona Sur del Conurbano bonaerense apenas sumó un punto en el choque con el ‘Lobo’. Con este resultado, Lanús quebró la racha de dos victorias consecutivas como local y además, por primera vez en el campeonato, no convirtió a lo largo de los 90 minutos.
“Nos falto un poco de carácter para saber sobrellevar el partido. El plantel muestra mucha capacidad y tiene enormes individualidades que desequilibran en cualquier momento, pero carece de ideas para cuando esas figuras no están en su mejor día. Si confiamos sólo en un par de jugadores se nos puede complicar el panorama”, aseguró el volante.
Y agregó: “Gimnasia entendió su planteo y sus limitaciones. Sabiendo que era menos en los papeles, hizo un juego inteligente y casi termina venciéndonos. En nuestro caso, cuando no logramos imponer el fútbol que nos caracteriza, perdemos el rumbo fácilmente y eso se vio en la cancha”.
Titular en los últimos dos encuentros, el “Pulpito” reemplazó en esta oportunidad a Agustín Pelletieri, suspendido por acumulación de tarjetas amarillas tras el clásico. Así, desde el campo de juego, analizó la realidad ‘granate’: “El plantel demuestra que tiene fundamentos como para ganar los partidos, pero creo que sufrió mucho el golpe anímico de la semana anterior”.
Para revertir la situación, Lanús tendrá revancha cuando visite en Mendoza a Godoy Cruz. El conjunto cuyano, que viene de derrotar a Estudiantes (1-0) en La Plata, está inmerso en un semestre con doble competencia, pues además de afrontar el certamen doméstico, disputa la Copa Libertadores.
“Se viene un compromiso muy complicado, en una cancha difícil que siempre nos costó. Debemos aprovechar el cansancio del rival para sacar tres puntos importantísimos. Un triunfo nos podría envalentonar y empezar a cambiar la actualidad del equipo”, consideró González.
Así, con una victoria fuera de casa, condición en la que acumula dos caídas al hilo, Lanús intentará cosechar tres unidades que seguramente tendrán valor agregado. Es que determinadas victorias levantan la autoestima, y el “Granate”, que ya padeció el caso opuesto, buscará ser ejemplo positivo de aquella conclusión.
AUNO 15-03-11
MRQ-MFV
