El director técnico de Banfield, Juan Manuel Llop, aseguró que no tiene pensado dar un paso al costado pese al malestar que generó entre los hinchas la derrota del pasado viernes ante Arsenal (1-3) y se mostró dispuesto “a ponerle el pecho” al difícil momento que transita el equipo del sur.
“Jamás se me hubiese pasado por la cabeza renunciar, menos en una situación tan difícil como la que está pasando el plantel. Le voy a poner el pecho a este momento y tengo fe en que lo podemos revertir”, consideró.
Y agregó: “Creo que el tema de mí renuncia salió a la luz porque no di declaraciones después de que terminara el partido del sábado pasado. Pero bueno, esas son especulaciones que se hicieron por ahí, y no me puedo hacer cargo de todo lo que se comenta”.
El presente deportivo que atraviesa el equipo del sur del conurbano bonaerense no es la mejor, ya que de los cuatro partidos que disputó durante el torneo Apertura 2008, apenas pudo sumar tres puntos al derrotar a Racing (3-1) en el estadio Florencio Sola, en un compromiso válido por la segunda jornada del certamen.
Pese a que Banfield no tuvo un buen inicio de competencia y que se encuentra a siete unidades de los líderes del campeonato, Vélez y Boca, en la tabla general de la temporada 2007-08 se mantiene expectante con chances firmes de pelear por un lugar para entrar a los certámenes internacionales.
En la sumatoria de los campeonatos, Banfield cosecha 35 unidades y actualmente se encuentra a sólo dos puntos de Huracán, que es el último dentro del pelotón de equipos que, por ahora, se clasifican a las copas.
Por eso mismo, Llop se reconoce conforme con la actuación que tuvieron sus dirigidos en lo que va de la temporada, pues considera que a pesar de este flojo arranque experimentado en el Clausura, la posibilidad de irse ‘de copas’ todavía se mantiene intacta.
“Sucedieron cosas que no concuerdan con lo que uno tenia proyectado hacia el futuro. Tenemos que estar tranquilos y responder el sábado para seguir sumando y no perderle pisada a los de arriba”, explicó el rosarino.
Precisamente, el sábado, en el estadio de Lanús se disputará el clásico sureño, en que los dirigidos por Llop se juegan mucho más que tres puntos, y una victoria en este trascendental encuentro podría llevar algo de tranquilidad al grupo que conduce el rosarino.
La semana pasada, el DT recibió varias amenazas telefónicas tras la derrota que el conjunto albiverde sufrió en Liniers ante Vélez por 3-0, una situación que contribuyó a enrarecer el acontecer político que se vive en la entidad.
“No le encuentro explicación concreta a esta situación que tuve que pasar junto a mi familia. Es muy doloroso tener que recibir amenazas y llamados anónimos. Será que no le caigo simpático a alguien, o como Lanús salio campeón ahora le exigencia es mucho mayor. También hay que tener en cuenta que éste es un año electoral”, concluyó.
AUNO-03-03-08
MM-LDC
