Lanús quiere que la cuarta sea la vencida

De la mano de Guillermo Barros Schelotto, el ‘Granate’ vuelve a pelear un torneo hasta el final, algo que ya vivió en otras tres oportunidades desde 2012. Si bien el líder Racing está a dos puntos, en el club de la Zona Sur del GBA sueñan, justamente, con la cuarta estrella de su historia.

Matías Quercia

Lanús, noviembre 28 (AUNO).- Como ya es costumbre desde el arribo de Guillermo Barros Schelotto, en 2012, Lanús está en plena lucha por el título en este Torneo cuando apenas restan dos jornadas para su conclusión. Así como ocurrió en tres de los cuatro certámenes que ya disputó ‘Granate’ con el mellizo como entrenador, otra vez está a tiro de la corona, y en esta ocasión confía en poder sellar la consagración para dar la vuelta olímpica.

Los adversarios en la pelea esta vez son Racing y River. La Academia está dos unidades por encima tanto del “Millonario” como del propio club de la Zona Sur del Conurbano bonaerense. Y los rivales a vencer, expuestos por el calendario, son Boca, al que recibirá el domingo en la ‘Fortaleza’ de Guidi y Arias, y Newell’s, conjunto con el que se verá las caras en Rosario en la última fecha de la temporada.

No será la primera vez que Lanús tenga la chance de festejar en el Parque Independencia en el corto plazo. Hace un año, y en plena efervescencia por la alegría que había significado ganar la Copa Sudamericana un par de días antes, el itinerario llevó al ‘Grana’ a Rosario con la obligación de superar a la ‘Lepra’ y esperar un mano en Liniers, donde Vélez se medía con San Lorenzo, elenco que finalmente salió campeón.

No alcanzó a San Lorenzo

La definición del Torneo Inicial 2013 tuvo una particularidad que envolvió de dramatismo aquel domingo 15 de diciembre. Es que los cuatro conjuntos que tenían chances de dar la vuelta olímpica se cruzaban en choques entre sí. Previo a esa fecha final, el ‘Ciclón’ iba dos puntos por encima de los otros tres contendientes, que acumulaban 30 unidades. Distancia suficiente que le sirvió para festejar.

Mientras en la cancha del ‘Fortín’ la paridad fue sin goles, en Rosario, al mismo tiempo, la historia tuvo un ida y vuelta constante, a tal magnitud que los dirigidos por el ‘Mellizo’ se restablecieron de dos desventajas y terminaron empatando 2 a 2 –los goles del visitante fueron de Paolo Goltz y Jorge Pereyra Díaz-. Un gol para cualquiera de los dos, en el tramo final, hubiese decantado en un desempate con la entidad de Boedo, que había terminado su cotejo unos minutos antes.

La presentación anterior en el campeonato, en el marco de la 18va fecha, puso a Lanús frente a Boca, justo el mismo rival con el que chocará el domingo. En Guidi y Arias fue empate 2 a 2, con un once inicial repleto de juveniles, ya que a las 72 horas afrontaba la revancha copera con Ponte Preta de Brasil.

De seis puntos en disputa cosechó dos, y no le alcanzó para posicionarse como el líder del certamen y así confirmar un histórico doblete junto al título a nivel internacional.

Ahora bien, aquella ocasión fue la tercera vez que el ‘Grana’ llegaba con chances de ser campeón, al menos, a la penúltima jornada. En los primeros dos semestres con Barros Schelotto al frente, Lanús estuvo en la pelea. Y como en diciembre pasado, también se quedó en las puertas de la gloria.

Se desinfló en las últimas tres fechas

En el debut del ‘Mellizo’, en el Torneo Inicial de 2012, luego de un comienzo dubitativo, una racha positiva que estableció el récord de siete halagos en fila, ubicó al equipo de la Zona Sur del GBA en la vanguardia de la tabla de posiciones. Con quien disputaba la corona era Vélez, que en el cierre no flaqueó y disfrutó.

Lanús iba al galope en el certamen, pues hilvanó triunfos desde la 10ma a la 16ta jornada. Sin inconvenientes despachó en la ‘Fortaleza’ a Unión, Argentinos, Tigre y San Martín de San Juan, mientras que a domicilio derrotó a Atlético de Rafaela, Independiente, y Belgrano, este último con una sobria actuación en Córdoba que lo catapultó a las alturas.

Sin embargo, en las últimas tres fechas apenas sumó dos unidades, producto de empates con Estudiantes y San Lorenzo, ambos de local y 0 a 0. Ya cuando se midió con el “Ciclón” la historia estaba sellada, ya que Vélez venía de consagrarse la semana anterior, al momento que venció a All Boys en Floresta y aprovechó el traspié de Lanús en el Monumental, al perder por la mínima diferencia.

En La Plata perdió la felicidad

La revancha iba a llegar pronto para Barros Schelotto y compañía. En los siguientes seis meses, Lanús armó una campaña de lujo, especialmente en el tramo inicial. Al recuperar el juego colectivo de aquel bloque de partidos con victorias, marchó invicto en el campeonato durante 14 jornadas hasta que se topó con San Martín, en San Juan, que le ganó por un certero 3 a 1.

Y desde allí, el panorama se trastocó y lo que parecía todo encaminado a conseguir una nueva estrella en el escudo para la institución se vio ensombrecido por una lucha que quedó trunca. Tras aquella derrota en Cuyo, empató con Belgrano, de local y sin goles.

Luego, el calendario dispuso a Estudiantes como adversario, en La Plata. Y después de un primer tiempo que vio al dueño de casa vencedor por 2 a 0, el compromiso se suspendió por incidentes en las tribunas que decantaron en el fallecimiento de un hincha de Lanús. Párrafo aparte para el momento, pues desde ese instante los simpatizantes visitantes quedaron inhabilitados para asistir a las canchas en Primera División.

Con el resultado negativo a cuestas, Lanús debía revertir la historia si pretendía hacerle frente al líder, Newell’s, que avanzaba en el campeonato con solvencia de la mano de Gerardo Martino.

Y el ‘Granate’ dio una muestra de carácter a los pocos días con una goleada histórica sobre River en Guidi y Arias, en el marco de la 18va jornada. Sin embargo, para tener chances de consagración, primero había que dar vuelta la desventaja con el ‘Pincha’ en un cotejo que se disputó entresemana. Si se lograba el objetivo en los 45 minutos restantes, se arribaba a la última fecha palmo a palmo con la ‘Lepra’.

Pero no hubo caso. El anfitrión se hizo impenetrable en el Estadio Ciudad de La Plata y, pese a las variantes que propuso Barros Schelotto, el resultado quedó idéntico a como se había estipulado en el segmento inicial. Así, Newell’s festejó en Rosario lo que veía por televisión en la capital bonaerense.

Por eso en la última fecha poco importaba el tanteador, y Lanús se quedó con un 2 a 2 en el ‘Nuevo Gasómetro’ mientras observaba cómo otro título se le escapaba.

¿La cuarta será la vencida?

Hoy se le abre una nueva oportunidad al club de la Zona Sur del Gran Buenos Aires. Boca y Newell’s, otra vez en el camino, como hace un año. Obligado a derrotarlos para soñar con la consagración, requerirá esperar por una mano por parte de Rosario Central y Godoy Cruz, los dos escollos que le quedan a Racing, el actual mandamás. Y, a su vez, no dejar de observar lo que ocurra con River, el otro involucrado en la lucha. En su caso, los rivales serán Banfield y Quilmes.

Quedan un puñado de días para definir a un nuevo campeón del fútbol argentino y Lanús está una vez más en la disputa. Confía que ahora sí, la cuarta con Barros Schelotto al mando, sea la vencida para conseguir la cuarta estrella de su historia.

AUNO 28-11-14
MQ-MJV

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