(AUNO). Así lo afirmó el representante de la OPS en el marco del Seminario Internacional “Salud: sistemas de financiación en Argentina, Brasil y Chile”, en el que también participaron el rector de la Universidad de Chile, Luis Riveros y el superintendente de Servicios de Salud de Argentina, Rubén Torres.
En el seminario, que fue parte del “IV Encuentro del Mercosur” realizado en Buenos Aires, Sotelo explicó que en los últimos veinte años “han habido importantes reformas del sector salud en los países Latinoamericanos”. Estos cambios se dieron en el marco de lo que se llamó “la modernización de los estados”, que comenzó a fines de los ´80. A principios de los ´90 detalló los países de la región acordaron que la búsqueda de políticas unificadas demandaba la realización de foros regionales constantes, a partir de los cuales se establecieron cinco principios básicos: equidad, eficacia, efectividad, calidad y sustentabilidad.
En el balance de estas reformas, Sotelo reconoció importantes avances “en lo que hace a la gestión y la eficacia económica”, que significó un reajuste en las organizaciones a través de la descentralización y la privatización.
Sin embargo, problemas como es desfinaciamiento, la mala calidad y la inequidad en el acceso a la salud recibieron poca atención durante la década de los ´90, reveló el representante de la OPS.
“Estos desafíos señaló hacen necesaria una nueva generación de reformas que apunten a resolver las problemáticas pendientes. Deberían ampliar la protección en salud y garantizar el acceso universal”.
Para ello, Sotelo afirmó que “debe garantizarse el financiamiento, mejorar la calidad de los servicios, fortalecer las prácticas de control y evaluación de los Estados, formar más y mejores recursos humanos, atender a las cualidades específicas, y alinear, al mismo tiempo, los consensos para lograr políticas de salud unificadas”.
Sotelo reconoció que “el principal desafío es obtener el consenso para la ejecución de las estrategias orientando la atención a la salud de la población”.
Esta nueva generación de reformas “debe estar orientada a los criterios del mercado y a la eficiencia económica porque están insertas en un marco internacional de objetivos y metas comunes a todos los países de la región y el mundo”, concluyó el representante de la OPS.
Por su parte, Torres sostuvo que “los Estados deben ser entes generadores de políticas que apunten a reducir inequidades” y propuso que “la mirada individualista que caracterizó a las políticas ejecutadas en los ´90, debe dar paso a una perspectiva colectiva”.
En tanto, Rivero consideró que “los países deben aprender mirándose los unos a los otros” y subrayó que “los retos unifican a los países latinoamericanos en lo que hace a las políticas de salud”.
AUNO 28-10-03 mar cb dc
