El avance de la Justicia en materia de saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo y las críticas al “cuello de botella” que se genera por falta de medidas efectivas fue una de las cuestiones que la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) destacó en su informe ambiental de Argentina y la región de 2010.
El caso adquirió trascendencia en el informe por ser uno de los que más ha evolucionado debido a la intervención del Poder Judicial junto con autoridades autónomas como la Defensoría del Pueblo de la Nación, el Ministerio Público y también la ciudadanía.
Para FARN, el gran desafío es la ejecución de las sentencias ambientales, porque aunque en muchos casos se avanza con pautas para su implementación, la culminación real de éstas se hace con cuenta gotas.
Sin embargo, “el gran desafío es la ejecución” de esas medidas “dado que si bien en muchos casos se avanza con pautas para su implementación, aún aparece como el gran ‘cuello de botella’ del sistema”, sostiene el texto.
En la época del menemismo, el Banco Mundial dio un préstamo de 500 millones al Estado para la ejecución del saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo, y luego otro de 300, pero todo el dinero no fue utilizado y se desconocen las precisiones de su utilización.
Así es que el informe concluye que el sector privado, académico y las organizaciones de la sociedad civil deben implementar una consideración estratégica a corto, mediano y largo plazo, a través de un proceso de conocimientos sólidos que garanticen la participación de la ciudadanía.
Uno de los ejemplos más concretos de trabajo en conjunto entre organizaciones de la sociedad civil y otros sectores, es el del Cuerpo Colegiado del Riachuelo, que se encarga de promocionar acciones destinadas a expandir y generar conciencia ciudadana respecto de la grave problemática de la cuenca Matanza-Riachuelo.
Durante el acto de presentación del informe, la directora ejecutiva de FARN, María Eugenia Di Paola, destacó que “para revertir la situación actual en la que se encuentra el ambiente, las responsabilidad de los distintos sectores es fundamental” y agregó: “Existe un aspecto clave que debería estar en la visión estratégica de los distintos actores sociales: la integración de la cuestión ambiental a las decisiones públicas y privadas”.
LK-AFD
AUNO-09-04-10
