El primer tiempo comenzó trabado y con muchas impresiciones, tanto del lado de Banfield como del lado de Vélez.
La intensa lluvia caída sobre el estadio José Amalfitani hizo que el partido se “ensuciara” con caídas y resbalones, a la vez que se dificultó el juego al ras del suelo, lo que obligó en muchas ocasiones a recurrir a pelotazos que terminaron en la nada.
Hubo pocas situaciones de gol para el equipo de Liniers y el arquero Enrique Bologna pudo neutralizar casi todas sin problemas, mostrando seguridad.
Por el lado del equipo del Sur del Gran Buenos Aires, sólo hubo una situación de riesgo: un tiro libre del mediocampista Walter Erviti que terminó el corner.
Cuando parecía que el primer tiempo iba a terminar empatado, una contra bien ejecutada por el “Taladro” marcó la diferencia y a los 30 minutos llegó el gol de Banfield.
Erviti tomó la pelota detrás de la mitad de la cancha y rápidamente metió un gran pase para el delantero Rubén Ramírez, que al ver al mediocampista Marcelo Carrusca le cedió la pelota para que llegara hasta el fondo de la cancha y metiera un pase atrás que encontró al delantero Cristian García solo frente al arco de Montoya, que no pudo evitar que el delantero mendocino la colocará de dereha junto al palo, para festejar de cara a la hinchada del “Taladro”.
Luego del gol, el equipo del entrenador Julio César Falcioni pudo ampliar la diferencia con un remarte de Marcelo Carrusca que se fue cerca del palo.
En el segundo tiempo Vélez salió decidido a empatar el partido. Sin embargo, en los primeros minutos del complemento, el que tuvo más ocasiones de gol fue Banfield, que estuvo cerca de convertir el segundo gol, mediante un tiro libre de Erviti, que bajó Marcelo Bustamante y que luego estrelló contra el palo Víctor López.
Vélez reaccionó con rapidez y se mostró más activo, pero no pudo vencer a la defensa del albiverde.
Banfield se mostró como un equipo ordenado y con sacrificio a la hora de marcar. Los primeros en defender fueron los delanteros y volantes que presionaron en campo rival y le bloquearon los espacios a un Vélez que seguía yendo hacia el arco rival con mucho ímpetu.
El “Taladro” se retrasó y dio lugar a más llegadas de Vélez que en los últimos minutos tuvo varias chances de gol y que convirtió a Bologna en uno de los protagonistas de la noche capturando todos los remates al arco y saliendo a cortar bien en los centros. Y así se fue con un gran triunfo de visitante que lo dejó bien parado de cara a la revancha, que se jugará el 16 de septiembre en el estadio Florencio Sola.
AUNO-02-09-10
FT-LDC