Ante un auditorio colmado, de aparente buen humor y acompañado por el Decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Subsecretario de Medios de La Nación, Gabriel Marioto, Martín Granovsky comenzó la charla con una breve introducción sobre el rol del periodista y sobre lo que significó para él su paso de un medio privado a la función pública.
Irónico, y como para romper el hielo, de entrada disparó: “ Pasé de la responsabilidad de subdirigir un medio como Página/12 a la irresponsabilidad de presidir una empresa del Estado”.
“Los periodistas no son héroes, pueden serlo, pero esencialmente no es esa la función. La función del periodista es ser curiosos, es investigar, inquirir, tener espíritu crítico, en suma, preocupación pública”. En este punto Granovsky reconoció a Jacobo Timerman como su maestro y recordó una frase de éste cuando le decía ‘entender alivia’, a lo que Martín agregó: “No resuelve las cosas, las cosas se resuelven de otra manera, socialmente, políticamente y cambiando la realidad, y el periodismo por sí solo no hace eso, pero entender alivia y ayuda a comprender las cosas que pasan”.
De lo dicho arriba se desprende quizá, el por qué de la decisión de pasarse de la estabilidad de un puesto seguro, en un medio privado, a la “irresponsabilidad” de dirigir una empresa estatal. “Esta fue una decisión moral y política, la de sumarse a un proyecto colectivo”.
De esta manera explicó Martín Granovsky su decisión y agregó “ pasé de un ejercicio periodístico a trabajar en una gestión que no es periodística, en la que fui designado por el presidente de los argentinos. Aquí hay una primera tensión, que no se resuelve teóricamente sino en la práctica. Esto es, pluralidad de ideas dentro de un sistema plural de medios. Lo cual significa, recoger, desde el punto de vista informativo, en una agencia que es pública, lo que la sociedad genera en toda su riqueza política, donde hay lugar para la información profunda sobre oficialismo y oposición, y también para todos aquellos fenómenos sociales que muchas veces no están a la vista”.
Luego de esta breve introducción se dio lugar a los interrogantes de los alumnos y de otros allegados que asistieron a la conferencia, entre los que se encontraban algunos propietarios de medios locales interesados, particularmente, por los nuevos convenios que TELAM está ofreciendo, por una módica suma, a los medios que deseen contratar el servicio.
La pregunta obvia tuvo que ver con la presunta neutralidad que debiera tener una agencia de noticias del Estado. Respecto a este tema el presidente del directorio de TELAM fue categórico: “Una agencia del Estado, desde el punto de vista publicitario debe ser neutral, no sólo porque de lo contrario sería ilegal, sino además porque sería ilegítimo, no puede hacer difusión partidaria. Desde el punto de vista informativo, no puede hacer propaganda, esto está claro. Pero dicho esto, una agencia no debe ser neutral cuando se trata de la justicia, de la preservación de los Derechos Humanos, de la necesidad del crecimiento económico y ante la construcción de una sociedad más plural, lo cual no significa que tenga que ser parte de la difusión de un partido político sino de un proyecto social”.
Respecto a las reformas que tuvieron lugar desde que Granovsky se hizo cargo de la presidencia de TELAM o, mejor dicho, desde que fue nombrado por este Gobierno, Martín desarrolló lo que para él es un plan de “horizontalizar la información”. Este consistiría en la efectivización de convenios con diferentes instituciones como Municipios, universidades, etc, y con medios locales y del interior de país que sirvan como generadoras de información y como reflejo de la riqueza social. “La idea es horizontalizar, interconectar, intercambiar historias, esto implica que nuestra gente salga a la calle e investigue. No queremos una agencia reproductora de gacetillas, queremos que se produzcan contenidos”, explicó.
“Nos importa mucho menos la opinión de los periodistas que la información que consiguen, hay que achicar el espacio de opinión de la agencia, lo cual no significa que no haya crítica. Lo más importante es informar, contar, explicar, exponer claves”. Agregó.
Juan Pablo Kofman