El canasto ecuménico

El municipio instó a los vecinos a renovar sus canastos de basura por uno con características únicas y obligatorias. Envió los avisos junto con la boleta de barrido y limpieza. Es parte de un conjunto de medidas que pretende reducir los residuos en el distrito y cambiar los hábitos de higiene.

Una polémica novedad recibieron los vecinos de Almirante Brown: tendrán que reemplazar sus canastos de basura por uno con medidas y características obligatorias, según una nueva disposición del Ejecutivo municipal.

La sorpresa que llegó a través de un folleto junto con el recibo de la tasa municipal no explica cuál será el valor del canasto, quién lo venderá, quién controlará el cumplimiento de la medida ni desde cuándo tendrá vigencia.

Según la ilustración que muestra el folleto –-que deja en claro que “es obligatorio tener los cestos de basura adecuados— los nuevos canastos deberán tener como mínimo 1,20 metros de altura y contar con tapa para evitar que los animales rompan las bolsas.

Fuentes de distintas secretarías del Ejecutivo comunal (que prefirieron reservar su identidad) aseguraron a esta agencia desconocer en detalle este nuevo proyecto, llamado “La basura: su lugar”.

Así y todo, los vecinos tendrán que comprar estos nuevos cestos y reemplazar los que ya tienen en sus veredas, sin importar si son nuevos o viejos o si están o no en buen estado.

La escasa información que proveen la propaganda y los empleados municipales sumada a la idea de poner a todos los habitantes de la comuna en un gasto de dudosa necesidad hace difícil creer que ésta imposición se haga efectiva.

La medida es parte de la segunda etapa de un proyecto llamado “No ensucies, no te ensucies, Brown somos todos” que pretende cambiar los hábitos para sacar la basura y que desde el comienzo de la gestión de Darío Giustozzi, a fines de 2007, informa con una avioneta que recorre el municipio cuándo y cómo se lo debe hacer.

El folleto que ilustra el polémico canasto también recuerda a los vecinos que no deben sacar sus deshechos a la calle fuera horario ni durante los fines de semana ya que el camión recolector no pasa esos días.

Este plan, según aseguraron funcionarios comunales, busca poder reducir a futuro la cantidad de veces que el camión recolector pasa por los domicilios: “En países del exterior sólo va dos días por semana, mientras que en este municipio lo hace seis veces”, justificó un funcionario muy cercano al intendente.

YSV-AFD
AUNO-25-02-2009
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