El docente Daniel Orihuela aseguró que “la relación entre la gran cantidad de aluminio que recibe un paciente de diálisis y una encefalopatía, es la más probada científicamente” y añadió que “esto alerta sobre la necesidad de controlar estrictamente el nivel de aluminio del agua usada para preparar las soluciones”.
La encefalopatía de diálisis, explicó el investigador, “es un cuadro neurológico típico de los pacientes dializados, que se caracteriza por el trastorno intermitente en el habla y la dispraxia, entre otros desórdenes”.
A partir de investigaciones realizadas en el exterior, al Mal de Alzheimer “#8220;un trastorno cerebral que causa la pérdida progresiva de la memoria- también se lo vinculó con la exposición al aluminio.
La hipótesis que sostiene que el aluminio es uno de los factores desencadenantes de esta enfermedad se basa en el hallazgo científico de altos niveles de este elemento en el cerebro de los individuos con Alzheimer, pero esta relación aún no fue comprobada.