El hombre acusado de asesinar de 17 puñaladas e intentar abusar sexualmente a una niña en la localidad de Fiorito, Lomas de Zamora, se negó a declarar ante la Fiscalía del Departamento Judicial local y seguirá detenido luego de haber sido imputado por el delito de “abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa y homicidio agravado”.
Durante las indagatorias, la madre y el hermano de Marisol, la niña asesinada, prestaron declaración testimonial ante la fiscalía, según informó la agencia Noticias Argentinas.
La víctima de 9 años fue vista por última vez el lunes 23 en la puerta de su casa, y su cuerpo fue encontrado sobre un colchón en el domicilio del acusado, horas antes de que un grupo de vecinos que la buscaba le informara a la Policía tenia indicios de que la pequeña podría estar allí.
En repudio al crimen, una vez que los vecinos confirmaron sus sospechas destruyeron la casa del acusado situada en la misma cuadra en la que vivía la pequeña, ubicada en Murature e Islandia.
Pascual, de 23 años, fue golpeado, por lo que tuvo que ser trasladado al Hospital de Quilmes con una custodia policial.
Al respecto, José, el padre de Marisol, exigió a los policías que entreguen al acusado para matarlo con sus propias manos, según informó la prensa.
Los resultados de la autopsia confirmaron que la niña recibió 17 puñaladas por todo el cuerpo con un cuchillo “tramontina” y que no había sido violada, pero que tenía lesiones en la zona genital.
EF-AFD
AUNO-27-02-09
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