Denuncias por uranio en el agua, arroyos contaminados y desbordados, instalación de antenas de celulares, transformadores con PCB y empresas que arrojan residuos tóxicos a la vía pública son parte de las más de 40 denuncias públicas que distintas organizaciones barriales y partidarias detectaron el año pasado en las los partidos de Ezeiza, Esteban Echeverría, y Lomas de Zamora, y que aún no se resolvieron.
A la hora de hacer un repaso, la memoria de las denuncias da cuenta que, por ejemplo, en Lomas de Zamora, el caso más relevante es el de la contaminación y desborde del Arroyo del Rey. Debido a la acumulación de basura y las intensas lluvias, ese afluente de agua se desborda constantemente y afecta a los vecinos que viven en sus orillas y alrededores.
Los habitantes del barrio lomense Santa Marta han efectuado varias denuncias ante la Municipalidad a lo largo de todo el año pasado, pidiendo la limpieza del arroyo y su entubamiento.
La municipalidad había comenzado obras de relleno y entubado del curso de agua, pero fueron paralizadas porque algunos vecinos están en contra de ese tipo de obra argumentando que no pueden cruzar de una orilla a la otra.
La remoción y la nueva ubicación de transformadores con altos índices del nocivo refrigerante PCB también es un caso de contaminación ambiental que afecta al partido. Está probado que la sustancia que despiden estos transformadores puede provocar cáncer en la gente que vive cerca de ellos.
En Ezeiza, el hecho que resonó más fuerte fue la contaminación de la red de agua con uranio. El conflicto comenzó a mediados de 2005 cuando los vecinos de esa localidad denunciaron que a causa de los desechos tóxicos que el Centro Atómico de Ezeiza vertía en la red acuífera, los vecinos estaban muriendo de cáncer.
En Esteban Echeverría, luego de varios reclamos frente a la Municipalidad y pericias realizadas al agua, los vecinos —aún sin respuestas— decidieron formar una asamblea para luchar por el cese de derrames tóxicos en el agua y el saneamiento de la red.
También el año pasado y en el mismo municipio explotó una fábrica clandestina de químicos que provocó una nube tóxica y el derrame de tóxicos. 500 vecinos tuvieron que ser evacuados como saldo del siniestro. La fábrica sigue funcionando.
El recuento de casos de conflictos ambientales en la provincia de Buenos Aires durante 2006 fue hecho por el Bloque Ari de la legislatura bonaerense con el objetivo de demostrar que “cada dos días hay un conflicto (de ese tipo) en la provincia”.
Tal demostración sirvió de fundamento para el proyecto de ley que el partido presentó ante la Legislatura bonaerense, y en el que propone la creación de un Foro Ambiental provincial.
El diputado por el Bloque Ari y autor del proyecto, Walter Martello, opinó que la creación del foro es una respuesta a “la necesidad de una estructura específica para la investigación de las violaciones contra el ambiente en la provincia”.
Otro tipo de los conflictos ambientales más recurrentes y menos atendidos son la instalación de antenas de celulares, por cuyo desmantelamiento piden los vecinos de los partidos de Lomas de Zamora y Lanús.
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