El despido de más de 30 trabajadores y el castigo por parte de la empresa al derecho constitucional de huelga son hechos que denunciaron y movilizaron a más de un centenar de empleados de una empresa tercerizadora de Edesur a acampar nuevamente frente a la sede de la distribuidora de energía en Lomas de Zamora para reclamar por el cese de los telegramas de despido y la reincorporación de los obreros. El pedido que dura tres días recibió el apoyo de organizaciones gremiales y llegó al Ministerio de Trabajo de la Nación, con cuyos representantes está prevista una reunión a principios de la próxima semana .
“En los últimos dos días, más de 20 compañeros recibieron telegramas de despido alegando que son por prácticas sindicales y huelga”, denunció uno de los representantes de los empleados de la firma Leccentro SA, Andrés Porter, quien además precisó que fueron 150 los telegramas enviados por la firma.
Es que los obreros que se encargan de realizar la lectura de los medidores casa por casa y por eso comprometen “directamente la facturación de la firma”, se organizaron luego de que a comienzos de semana dos personas fueran echadas a pesar de un arreglo que habría firmado la empresa en el que se comprometía a no realizar despidos sin una justificación específica.
“A partir de que nos movilizamos por primera vez empezaron a llover telegramas masivamente”, graficó Porter, que en diálogo con AUNO denunció haber recibido “presiones” para que detengan “la lucha”.
A pesar de que las denuncias y reclamos de los asalariados hayan llegado a ser presentadas al Ministerio de Trabajo y que los obreros esperan que ser citados el “lunes o martes” de la próxima semana a una audiencia en el organismo público, el vocero de Edesur había dejado claro a esta agencia que “de parte de la compañía de ninguna manera hay decisión alguna que lleve a la reducción de personal”.
Por su parte, Porter se mostró optimista y aseguró que “la conciliación obligatoria tendría que darse porque es ilegal la forma de los despidos”, y en ese sentido sentenció: “No hay nadie que pueda decir que los despidos son válidos, es un derecho que está en la constitución”.
De hecho, quien decidió los despidos fue una contratista cuyos propietarios admitieron el envío de telegramas, aunque evitaron dar a conocer los motivos.
Respecto de las medidas de fuerza que se prevén a futuro, el representante de los trabajadores anticipó que el lunes “a primera hora” volverán a acampar al 9000 de Hipólito Yrigoyen para continuar el reclamo que “solamente se levantará durante el fin de semana” y adelantó que, también, presentarán el caso la cartera laboral bonaerense para “acelerar” una respuesta.
La causa defendida por el grupo de obreros organizados fue apoyada tanto por la agrupación política Libres del Sur como por la delegación de la CTA de Lomas de Zamora, que reclamó junto con la Federación de Trabajadores de la Energía la República Argentina (Fetera) “que se termine con la práctica precarizadota de la tercerización laboral en las empresas de servicios públicos”.
De hecho, la federación denunció a través de un comunicado que mientras “la distribuidora eléctrica, heredera de SEGBA, ha desatado su ansiedad por mantener las tasas de ganancias que exportó al exterior” desde la década de 1990, “decenas de trabajadores comenzaron a denunciar en distintos puntos de la Capital Federal y del Gran Buenos Aires, las cesantías masivas” que “rondaría los 9000 trabajadores”.
PER-AFD
AUNO-03-07-09
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