Lomas de Zamora, octubre 22 (AUNO).- Investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) pertenecientes al Laboratorio de Comunicaciones de la Facultad de Ingeniería de Mar del Plata desarrollaron el primer audífono digital y programable que permite mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidades auditivas.
El dispositivo de asistencia auditiva, que es de producción nacional y cuenta con un bajo costo, fue realizado por Alejandro Uriz, doctor en Electrónica y Becario posdoctoral del CONICET, como parte de su trabajo de tesis, en el que optó por realizar una labor que cubra una necesidad específica que tenga la población en el país.
Según Uriz, “los audífonos digitales tienen un costo de alrededor de 3 mil a 5 mil dólares y las obras sociales a veces no los cubren”, por eso el equipo de investigación “no sólo viene a resguardar lo básico sino que también cuenta con las características de los mejores audífonos implementados, y además está producido en el país”.
Para el desarrollo del audífono se estudió en detalle las funciones de extensor de audibilidad, “que permite que una persona escuche lo que sin el audífono no escucharía”, y el de tratamiento de acúfenos, “que es la percepción de ruidos en el oído que no corresponden con ninguna señal acústica en el entorno, y generalmente es descrito como un zumbido”, explicó el investigador a través de un comunicado.
En su interior posee micro controladores comerciales para que, en el caso de producirse alguna falla pueda ser reparada, evitando su descarte, y además, se puede alimentar con la batería del mismo audífono o con pilas, ya que “la idea es que el dispositivo contemple este tipo de situaciones”, declaró Uriz.
Otra de las características importantes, es que puede ser programado desde una computadora y reprogramarlo en función de las necesidades y cambios de la condición auditiva que la persona va experimentando a lo largo de su vida.
Este proyecto fue uno de los ganadores del concurso INNOVAR en su edición 2013, en la categoría Investigación Aplicada, realizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.
También, el equipo recibió un subsidio de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) del Ministerio de Educación de la Nación, con el que se logró financiar la compra de maquinarias para construir el dispositivo a pequeña escala, y además “se está analizando hacer un convenio con alguna empresa para poder producirlo comercialmente”, comentó Uriz.
Actualmente, el proyecto fue patentado y la oficina de Vinculación Tecnológica del CONICET Mar del Plata está trabajando en el proceso de transferencia, en búsqueda de interesados en producirlo o en adquirir la patente, ya que se estima que para mitad del 2016 se estarán realizando las pruebas clínicas para llevar adelante la parte final de la realización.
A través de un estudio elaborado a partir de preguntas específicas incluidas en el Censo Nacional del 2010 se pudo detectar que en Argentina, alrededor de 300 mil personas conviven con discapacidades auditivas y, en la mayoría de los casos, es imposible encontrar una solución económicamente accesible.
En términos generales, la Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que más de mil millones de jóvenes de todo el mundo podrían sufrir pérdida de audición por una exposición sostenida a ruidos que forman parte de los hábitos cotidianos.
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