Firestone continúa clausurada

Desde el martes 14, un sector de la planta de Llavallol fue clausurada por no tener habilitación en las calderas. Sin embargo, hay denuncias sobre mal uso de combustibles.

La planta de la fábrica de neumáticos Firestone, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, continuará clausurada por tiempo indeterminado hasta tanto las autoridades nacionales no corroboren que la empresa dejó resolvió las “contravenciones” detectadas en la habilitación de calderas, según confirmaron a este medio voceros de la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación.

Sin embargo, la medida también habría sido tomada en el marco de una resolución del Gobierno nacional que restringe la utilización de gas oil a todas las industrias. Al respecto, una fuente que se desempeña en la administración de la planta de Llavallol reveló a AUNO que la clausura del sector de calderas dispuesta por la Medio Ambiente “se debió, entre otras cosas, a la sustitución del gas por combustibles líquidos de mayor grado contaminante”.

En referencia al plazo de la clausura, el titular del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna), Pedro Wasiejko, estimó que “en estos días se va a realizar una prueba, y si todo está bien el sector de calderas volverá a funcionar”; inclusive tanto la firma, como la secretaría a cargo de Romina Piccoloti no supieron calcular la fecha en que se reabrirá ese sector de la fábrica.

El martes pasado, técnicos de la cartera ambiental clausuraron el sector de calderas de la planta ubicada en la avenida Antártida Argentina y Camino de Cintura, en Llavallol, por presuntos incumplimientos en el plazo de renovación de las habilitaciones requeridas para su funcionamiento.

Fue en este marco que un administrador de la firma aseguró a esta agencia que la clausura “tiene que ver con la contaminación que produce el fuel oil que la empresa utiliza en las calderas en lugar de gas”.

Sin embargo, Wasiejko desconoció esta posibilidad y ratificó los motivos de la sanción expuestos por el organismo nacional: “Cada tanto se realizan unas pruebas de funcionamiento de las calderas y la Firestone no tenía la verificación al día”.

Al parecer, el cambio de un combustible por otro tuvo que ver con las restricciones de abastecimiento de gas impulsadas desde hace meses por el Gobierno nacional a las industrias.

A nivel nacional, la continuidad de los recortes de electricidad y gas a las industrias provocó paralizaciones de fábricas y hasta suspensiones de personal, como fue el caso del establecimiento de la marca Terrabusi ubicado en General Pacheco.

Respecto de esos recortes, a mediados de julio, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, anunció el lanzamiento del Programa de Energía Total, uno de cuyos objetivos es lograr la sustitución del uso del gas y la electricidad en la industria por combustibles líquidos; las empresas adheridas al programa, aseguró el funcionario en aquella oportunidad, recibirían subsidios para amortiguar los costos inherentes a la medida.

Al priorizar el Gobierno la provisión de gas en los hogares, que elevaron sus consumos como consecuencia de las bajas temperaturas, el sector manufacturero donde recayó con más fuerza fue el automotor: “El desabastecimiento de gas ha producido el cierre de algunas fábricas del rubro automotor, mientras que otras se han visto obligadas a reducir personal o disminuir la producción diaria”, enumeró Wasiejko.

La fábrica de Firestone, que tiene 1360 empleados, fabricó durante el año pasado 3,8 millones de neumáticos y proyecta superar los 4 millones este año. Además, durante los próximos cinco años la empresa anunció inversiones por 164 millones de pesos para aumentar un 50 por ciento la capacidad productiva.

FG-AFD
AUNO-16-8-07
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