El equipo del Servicio de Asistencia y Orientación Psicopedagógica (SAOP), perteneciente a la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ), festejó los 25 años de funcionamiento en una jornada con un recorrido retrospectivo sobre el objetivo de este espacio, que incluyó la presentación del libro digital SAOP 25° aniversario.
El evento comenzó a las 10.30 con las palabras del director del SAOP, Oscar Amaya, quien comentó que la clínica tiene como banderas “lo ético, lo político, lo estético y lo emocional”, porque su objetivo es tener “consonancia con la agenda nacional”. Desde el espacio querían cerrar los 25 años de vida, de lo que fue una “apuesta original”, con la publicación del libro.
La presentación de SAOP 25° aniversario, que próximamente se publicará de forma física por la editorial de la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN), contó con la participación del rector de la universidad, Diego Molea; el decano de la Facultad de Ciencias Sociales, Gustavo Naón; el decano de la Facultad de Ciencias Agrarias, Néstor Urretabizkaya; y de los miembros de la clínica psicopedagógica.
Después de la apertura de Amaya, Naón agradeció a los decanos anteriores por apoyar a la clínica ya que su objetivo, como el de la universidad, es “tender puentes”, porque sólo así se puede “mejorar la calidad de vida de la comunidad”. Y recordando las palabras de Héctor Germán Oesterheld, guionista de El Eternauta, expresó que la clínica siempre trabajó por “el héroe colectivo”, porque la universidad “no va al barrio” es “el barrio”.
Tras las palabras del decano, Amaya y la psicopedagoga Sonia Medina cantaron, recitaron y actuaron una historia inspirada en Juanito Laguna, el niño creado por el pintor argentino Antonio Berni. Al concluir la puesta en escena, comenzaron las charlas sobre las personas que pasaron y están en el SAOP, y se recordó con mucha emoción a su fundador, Lucio Cerdá, quien falleció en 2009.
Mientras distintos integrantes del SAOP contaban lo que vivieron y lo que representa para cada uno la clínica, una hoja en blanco iba pasando de mano en mano, en que dejaron escrito su mail para recibir el libro digital de forma gratuita.
Cerca del cierre de la presentación, llegaron a la sala las integrantes de Ludoteca en Movimiento, el programa de prácticas pre-profesionales del SAOP que asiste a niñas y niños que están en la lista de espera para ser atendidos en la clínica. El equipo hizo participar a todos los presentes de sus juegos.
La actividad en el Auditorio culminó con la psicopedagoga Rocío Sigel, quien interpretó sentada en la escalera, con un ukulele, Miedo y verdad, una canción de autoría propia, que fue compuesta durante la campaña presidencial.
En conversación con AUNO, Sigel aseguró que al pasar frente a SAOP, cuando aún era estudiante, se dijo: “Yo quiero estar acá”, y al momento de recordarlo se le pone “la piel de gallina”, y que al comenzar las pasantías se dio cuenta que la clínica era “su lugar”, y que fue hermoso para ella transcurrir todas las instancias, de “pasante, a residente y después psicopedagoga”.
Luego fueron a plantar frente a la ventana de la clínica un ginkgo, un árbol japonés, regalo de la vicedecana de la Facultad de Ciencias Agrarias, Laura Juan. Este árbol nipón representa esperanza, fuerza y resiliencia.
Desde que se creó el SAOP en 1998, este servicio ha ayudado a más de 2500 pacientes, y por él han pasado muchos y muchas estudiantes de psicopedagogía. La clínica atiende de forma grupal e individual entre lunes y sábados a más de 120 pacientes.
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