“Los adultos debemos dejar de culpar a los jóvenes”

La conclusión es de Oscar Castellucci, padre del joven que murió luego de ser golpeado por patovicas de La Casona. Fue en un homenaje del que participaron el ministro Daniel Filmus y el secretario de Derechos Humanos bonaerense, Edgardo Binstock.

En un acto en homenaje a su hijo Martín, Oscar Castellucci desmitificó la idea de que los jóvenes “son culpables de su destino” y responsabilizó a los adultos que ocupan posiciones de poder y “que generan violencia y discriminan”. Lo acompañó un panel integrado por el ministro de Educación de la Nación, Daniel Filmus, y el secretario de Derechos Humanos bonaerense, Edgardo Binstock.

“El que mató a Martín fue un adulto, el dueño del boliche era un adulto, los que distribuyen drogas son adultos, los que organizan la noche son adultos, los que generan violencia son adultos”, argumentó.

“Más que poner el ojo en los jóvenes, los adultos debemos mirarnos a nosotros mismos”, aclaró el padre del joven que murió el 6 de diciembre, tres días después de recibir una golpiza por parte de personal de seguridad del boliche “La Casona” de Lanús.

Desde esa mirada se realizó el lunes último el acto de imposición del nombre de “Martín Castellucci” a la cátedra de Derechos Humanos de la Escuela Normal Superior Nº 3 “Bernardino Rivadavia” de San Telmo, en el que participaron como panelistas el ministro de Educación, Daniel Filmus; el secretario de Derechos Humanos bonaerense, Edgardo Binstock; el vicerrector del Normal Nº 3, Francisco Cuniglio; y familiares y amigos de la víctima, organizados en la Asociación Civil Martín Castellucci (ACMC).

“Los adultos somos los responsables de esta sociedad –continuó Oscar— y debemos dejarles a los chicos ejemplos de vida diferentes. Es importante que ni jóvenes ni viejos nos encerremos en la soberbia de creer que lo sabemos todo y que no reproduzcamos el discurso de ciertos sectores de poder”.

El padre de Martín y presidente de la ACMC se refiere a “un discurso muy fuerte propulsado por adultos que no quieren cambiar absolutamente nada, que condena a la juventud y que trata de hacer aparecer a jóvenes como culpables de su destino”, lo que entiende como una mirada “que lleva a la desesperanza, a la desesperación y a creer que no se puede cambiar nada”. (Ver Los jóvenes tenemos que hacer valer nuestros derechos)

Luego de dejar en claro el “orgullo” que es para la familia el nombramiento de la cátedra de Derechos Humanos del Normal Nº 3, el padre de Martín señaló que la intención de la ACMC es “modificar las condiciones que llevaron a su muerte y hacer un esfuerzo por construir una sociedad mejor”.

“Cuando uno sufre una injusticia tan grande no modifica sus valores, construye en base a los que ya tenía. Pero ahora comprendemos claramente que una sociedad violenta requiere para ser modificada otra cosa que violencia, sino se repite el efecto. Frente a ella, debemos sostener la tolerancia”, propuso Castellucci.

Por ello es que considera “pequeños pero importantes pasos” el dictado de prisión preventiva a José Lienqueo Catalán, el boxeador amateur que, por fuera del régimen de agencias, empleó en forma particular el dueño de “La Casona” como personal de seguridad, según explicó a la Agencia Auno.

Informó además que esperan que la fiscal de Lomas de Zamora haga cumplir el llamado a indagatoria por su “responsabilidad penal pero no material”, pero que eso “es complicado porque la fiscal quiere desentenderse de la causa”.

En ese sentido, la madre de Martín y abogada de la ACMC, Ana Herrera, explicó que “para la fiscal, los policías y el patovica son ‘descartables’” y que han sido judicializados (en el caso de Lienqueo) o separados de sus cargos (los policías que controlaban la avenida 25 de Mayo, en Lanús, sobre la que estaba “La Casona”). “Pero el tema con Amado es distinto, porque tiene vínculos políticos y económicos con concejales lanusenses e incluso su suegro y su esposa trabajan en el Poder Judicial” de Lomas de Zamora.

Consultada acerca de las razones para considerar a Amado responsable del “asesinato” de su hijo, la mujer informó: “Cómo iba a organizar determinado comercio nocturno, Amado contrató al boxeador amateur José Lienqueo Catalán –-principal imputado en la causa y con dictado de prisión preventiva—- y, como le había dado ‘piedra libre’ a sus empleados de seguridad, arregló la connivencia con la Policía (Bonaerense de Lanús). Incluso, un policía vio cómo golpeaban a Martín y caía al piso”.

“Pese a eso –-continuó Herrera-— no detuvieron a los autores (de los golpes, José Lienqueo, y de la negativa al ingreso de un amigo de Martín al lugar, Jorge Romano), no registraron a los testigos y no quisieron llamar a una ambulancia. Cuando finalmente lo hicieron, casi obligados por los testigos, avisaron que había ‘un chico descompuesto’”. El chico descompuesto era Martín, “que vomitaba sangre, temblaba y le habían destrozado la cabeza”, contó Herrera.

A raíz de esas cuestiones es que la Asociación Civil Martín Castellucci trabaja desde comienzos de año educando a controladores de admisión y permanencia –-“patovicas es un término peyorativo”, explicaría Oscar más tarde—- y concientizando a los jóvenes sobre cómo deben actuar frente a la violación de sus derechos y los abusos de autoridad.

Minutos antes, el ministro Filmus destacó el trabajo de la ACMC como “de importancia en la transmisión de valores de tolerancia, no discriminación y justicia” y deseó que el legado de ese trabajo colectivo sea “que la discriminación y la violencia no sucedan más”.

En la misma tónica, aseguró que “la escuela es el mejor espacio para transmitir valores diferentes” a los actuales y terminar con la “impunidad responsable de mucho de lo que pasa y pasó en este país”.

Por su parte, el vicerrector Cuniglio recordó sus primeras experiencias en la docencia junto a Oscar Castellucci: “En aquel momento, supimos lo que era transitar las aulas, analizar problemas comunes, debatir, ponernos los cortos y jugar al fútbol con nuestros alumnos, y sentía que en esos momentos nos unía el amor”.

El cuarto de los panelistas fue el secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Edgardo Binstock, quien resaltó el carácter simbólico del nombramiento “Martín Castellucci” a la cátedra de Derechos Humanos del Normal 3 al afirmar que “el día en que fue asesinado, Martín creyó y luchó por los derechos humanos y en contra la discriminación”.

En la misma línea que Filmus, destacó el valor del camino emprendido por la familia del joven estudiante de veterinaria fallecido a los 19 años “desde un compromiso conjunto y no como un hecho aislado”.

Binstock se refiere a una serie de actividades que la ACMC viene realizando desde comienzos de año y que incluyen capacitación a controladores de admisión y permanencia (los “patovicas”), campañas conjuntas con el INADI de información de derechos a jóvenes en edad escolar, y el programa artístico “Apuesta por los jóvenes”.

Ese programa está dirigido por Mabel Gagino, representante del colectivo Artistas Independientes del Sur, y se trata de un espacio de teatro y música con eje en temas relacionados con la discriminación y la violencia. De hecho, durante la jornada realizaron cuatro sketches sobre discriminación racial y social, las limitaciones a los derechos de pensamiento y expresión y los abusos de autoridad.

Como testimonio de la jornada, Oscar Castellucci entregó en nombre de la ACMC una placa al vicerrector Cuniglio en la que se propone: “Memoria, tolerancia, solidaridad. Aprendamos y enseñemos a amar el futuro”.

Además de medio centenar de docentes y alumnos del Normal 3, amigos y familiares de Martín Castellucci organizados en la ACMC y el colectivo de Artistas Independientes del Sur, participaron también la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), María José Lubertino, y el presidente del Consejo Federal de la Juventud y septuagésimo séptimo nieto recuperado por Abuelas de Plaza de Mayo, Juan Cabandié Alfonsín.

LP-HRC
AUNO-28-08-07
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