“El Tricolor” se impuso en casa con la ley del ex

En una calurosa tarde de lunes en Adrogué, el elenco tricolor se impuso por 1- 0 ante “El MilRayitas”. El único tanto de la contienda llegó sobre el final, luego de un gran cabezazo de Jonathan Tridente, un jugador que supo lucir la camiseta de Los Andes.

Pablo Ribera

Lomas de Zamora, octubre 1, (AUNO).- Bajo un sol radiante en el Lorenzo Arandilla, el elenco tricolor consiguió tres puntos vitales de la mano de Jonathan Tridente. Aquel atacante que supo brillar con la casaca milrayitas, ésta vez fue el verdugo de un Los Andes que vuelve a pensar en la tabla de los promedios.

El duelo entre los dos conjuntos de la zona Sur del GBA se inició de manera muy pareja. Como se preveía, ambos salieron al campo de juego con la mirada puesta en el arco rival, aunque ninguno lograba hilvanar jugadas que generen demasiado peligro.
Recién 25 minutos después del pitazo inicial, la visita supo como inquietar a su rival. El delantero Aldo Visconti lo tuvo dos veces con remates idénticos en dos jugadas distintas. Primero recibió el balón dentro del área tras un centro desde la derecha y luego, a través de un regate, se sacó una marca de encima y disparó cruzado. En ambas el disparo se fue apenas desviado del palo izquierdo del arquero Pablo Burtovoy.

Sin embargo, la respuesta del dueño de casa no se hizo esperar. Brown intentó imponer su juego pero solo se limitaba a enviar centros al área. Fue así como, tras un pelotazo desde el costado derecho y luego de varios rebotes en el área, el balón llegó a los pies del lateral Rodrigo Acosta que –ante la atenta mirada de su hermano, Lautaro, delantero de Boca Juniors, en la tribuna— remató de volea, a las manos de un muy bien parado Luciano Díaz.

Si bien no hubo grandes emociones en la primera etapa, el conjunto de Lomas de Zamora se mostró un tanto superior a su contrincante. Fue más punzante en ofensiva y más ordenado en defensa. Además, contó con las más claras, aunque abusó del pelotazo. El anfitrión, en cambio, fue mucho menos de lo que pretendió ser. Intentó de varias formas pero no logró superar una defensa bien parada y se excedió, también, con las pelotas aéreas.

Pero el complementó se desarrolló muy diferente al primer acto. “El Trico” hizo todo lo que en los anteriores 45 minutos no pudo hacer. Entendió la necesidad de ganar en un partido que se había presentado muy complicado y se las ingenió para generarle serio peligro a un guardameta rival que en las pocas que tuvo había respondido muy bien.

La superioridad se notó más aún en los 20 minutos finales. La visita, por su parte, intentó salir del asedio rival pero contó con una nula producción en ofensiva y no lograba sostener la pelota. Los dirigidos por Pablo Vico se adueñaron del encuentro, inclinaron la cancha y produjeron muchas chances claras de gol.

Pero al local le faltaba el último toque. Hacía todo bien hasta llegar al área donde fallaba en la definición. Cuando faltaban diez minutos para el cierre, el asedio se hizo constante. Ante el empuje de su gente que se ilusionaba con rencontrar la victoria luego de cuatro jornadas, Brown tuvo la más clara del partido. Tras un córner desde la derecha apareció el delantero Gastón Grecco que ganó de arriba en el primer palo y la pelota besó el palo, allá, justo donde se besa con el travesaño. Pero el rebote le quedo a Tridente que desperdició una chance inmejorable dentro del área chica, tras cabecear apenas arriba del arco.

Luego de esa jugada, todo parecía indicar que la calurosa tarde concluiría sin emociones. La visita, a esa altura, valoraba el empate, aunque “El Tricolor”, en cambio no se conformó y siguió intentando. Fue así como a tan solo cinco minutos para el pitazo final, Jonathan Tridente quién no había estado fino en la definición se redimió y estampó, tras un cabezazo cruzado, el 1-0, tanto que no festejó debido a su pasado en el rival.

Con poco por jugarse, Brown pudo haber ampliado la ventaja, nuevamente por intermedio de Tridente que de volea emitió un disparó que se fue desviado. Al verse en desventaja, Los Andes fue desesperado en busca de un agónico empate que nunca encontró.

Así concluyó un duelo en el que el elenco de Adrogué, se impuso merecidamente. Los Andes no pudo repetir en la segunda mitad, todo lo bueno que había demostrado en la primera y su rival, con mucho más corazón que juego lo aprovechó y logró un triunfo que lo ubicó a tres unidades de la cima. Ahora visitará a San Telmo en donde intentará continuar por la senda de la victoria.

Para “El Milrayitas”, el panorama es totalmente antagónico. Sumó dos derrotas seguidas y cosecha tan solo nueve puntos en esa misma cantidad de encuentros disputados. Si bien el campeonato es largo y resta, mucho aún por jugarse, se encuentra a tan solo un punto del descenso. El fin de semana próximo tendrá la oportunidad de empezar a cambiar este pobre presente, cuando reciba, en el Eduardo Gallardón, a Flandria.

AUNO-01-10-12
PMR-LDC

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