El examen de Cortázar

Escrita en 1950, la novela tiene fuertes rasgos antiperonistas, discriminadores y machistas. Permaneció inédita por más de treinta años. Todavía sorprende la falta de estudios sobre esa publicación.

Horacio Raúl Campos

Lomas de Zamora, marzo 15 (AUNO) – Julio Cortázar escribió la novela El examen en 1950, pero por decisión del autor permaneció inédita hasta que se publicó póstumamente en 1986. Se trata de un texto profundamente antiperonista, discriminador y machista. Como tantos otros del mismo escritor.

Cortázar es uno de esos escritores argentinos que nomina calles, es motivo de homenajes en los salones legislativos, su nombre preside jornadas en ciudades importantes o en cualquier pueblo polvoriento, una placa se descubre de tanto en tanto en alguna plaza, seminarios llevan también su nombre y hasta hay gente que dice que lo “ama”, aunque no haya leído jamás siquiera un relato.

Hasta las mujeres se enojan si leen por allí que alguien dice que cierta literatura del tipo es machista. Y también hasta peronistas se enojan si ese mismo dice también que cierta literatura del tipo es profundamente reaccionaria, violenta y gorila. Criticar sus escritos, conocidos o no, es nadar contra la corriente y un trabajo que te hace ganar enemigos y perder amigos. Pero ganar también nuevos amigos.

Espacios académicos universitarios, avenidas porteñas y la Plaza de Mayo configuran los espacios básicos por donde un grupo de amigos deambula sin hacer nada en El examen.1

En la Plaza de Mayo, ese espacio primordial propiedad casi exclusiva del peronismo desde 1945, el grupo de personajes presencia una multitud que se dio cita para llevar a cabo unas honras fúnebres. Falleció alguien que Cortázar llama “hueso”, así en minúscula, pero sin comillas.

Casi todos los analistas coinciden en que se trata de una premonición de lo que dos años después habrá de ocurrir con el fallecimiento de Evita. Una inmensa multitud acongojada se congrega para despedirla y los personajes, como no podían ser de otra manera, miran desde afuera a la “barbarie”.

El grupo de amigos, obvio, pertenecen al bando de la civilización, son unitarios, afrancesados, antiperonistas y examinan a la multitud que es asimilada con las Montoneras federales que llegaron a Buenos Aires y ataron sus caballos a la Pirámide de Mayo, justamente en ese mismo espacio que 125 años más tarde los cabecitas y obreros industriales engrasados ocupan y meten las patas en las fuente.

La novela del escritor autoexiliado en Francia ya anuncia otro texto antiperonista de un año después: ‘Casa tomada’(1951), incluido en el libro Bestiario. Ese relato es una metáfora del país estancia. El título del libro podría eximir comentarios, aunque siempre será mejor no eximir comentarios y dejarlos por escrito. Se trata de la animalización que preside un libro.

El examen fue publicado por primera vez en 1986, dos años después de la muerte del autor. Sin embargo, fue terminado a principios de los cincuenta. Hoy, más de una década después de su fecha de publicación, y casi medio siglo después de su fecha de composición, todavía sorprende la falta de estudios sobre esa novela 2.

La niebla como metáfora del peronismo

Ese diagnóstico todavía sigue más o menos vigente. La novela fue terminada a inicios de los 1950. Con espacios claramente visibles de Buenos Aires y de la Plaza de Mayo en particular, Cortázar examina la Argentina gobernada por el peronismo; examina al peronismo.

Sobre la historia superficial de los personajes que van a dar un examen en una facultad, se desliza la escritura básica de rechazo profundo y racista del peronismo que se moviliza por las calles de la ciudad.

Las parejas de personajes Juan y Clara; y Andrés y Stella se mueven en una ciudad que es sin lugar a dudas la capital argentina, pero se trata de un Buenos Aires envuelto en niebla, hay una infestación de hongos, en el subterráneo viven perros y la gente acude masivamente en homenaje a un hueso (alusión a Evita) exhibido en la Plaza de Mayo. Hay abusos por parte de las autoridades oficiales. El Buenos Aires de El examen es una ‘ciudad tomada’.

Claramente se leen dos espacios, producto de la maniquea fórmula civilización o barbarie. Uno es el denominado “Casa”, el lugar donde se leen en vos alta textos literarios (algo así como el Salón de Marcos Sastre de la general del 37) y que se identifica, por tanto, con la civilización, frente a la barbarie de la Plaza de Mayo.

Los personajes, parásitos, sin apuros laborales ni económicos, callejean y observan desde afuera a la multitud reunida en la Plaza de Mayo para participar en unas honras fúnebres.

En la novela se hallan concentradas en sobredosis todas las violentas creaciones literarias contra el peronismo, que a esta altura se puede asegurar que configuran ya una estética del odio y en cuyo triste podio se encuentra también, entre otros tantos, Borges, el matricero de la literatura antiperonista.

Citas bibliográficas:
1. Julio Cortázar, El examen, Buenos Aires, Alfaguara, 1996.
2. Peter Standich, El examen de Julio Cortázar. Novela de transición, East Carolina University. http://cvc.cervantes.es/literatura. Este escritor participa de los mismos prejuicios que el autor objeto de su ensayo

AUNO-15-03-15
HRC-SAM

0 comentarios en «El examen de Cortázar»

  • Buena nota, Raúl Campos. Ideal para esclarecer a ciertas mentecitas que han hecho de la “vaca sagrada” un objeto de culto extremo. Solo porque el buen señor ya fallecido, tuvo el tino de subirse a la ola del “Castrismo” naciente.

    Jauretche ha escrito textos magistrales sobre el personaje, poniéndole en el lugar adecuado. Presumo que si el viejo maestro no hubiera tenido la mala idea de morirse en 1974, podría haberse hecho un festival, con las andanzas del “prócer literario”, posteriores a 1976.

    Cortázar fue TAAAN antiperonista, que negarlo, frente a notas como la tuya, es un ejercicio de estupidez militante.

    Se agradece la desburrada sobre el asunto

  • Cometes el error de seguir con la “leyenda de casa tomada es una analogía del peronismo”; Julio ya lo ha aclarado en una nota en España que fácilmente la encontras en Youtube donde comenta este episodio y la idea que surge por una pesadilla en sus sueños que al despertarse se pone a escribir. Cortázar no merece la reducción a “gorila” teniendo una “etiqueta” más amplia por su lucha Latinoamericana como ANTICAPITALISTA, es necesario que salgas del binarismo político argentino para que realmente puedas analizar al autor. El hecho de querer destrozar su obra por ser antiperonista es reforzar TU peronismo tal vez, pero la verdad que si quizás leyeras El libro de Manuel te sorprenderias al leer su opinión años más tarde donde abre un paréntesis de un “quizás peronismo en el futuro” con una visión esperanzadora. Reducir la Plaza de Mayo al 2015 a exclusividad del Peronismo es negar las marchas de Madres y Abuelas de todos los Jueves, y negar eso al contrario que gorila es muy de facho. Cortázar como podrás darte cuenta en su forma de escribir y relatar, abre el espectro burdo de lo que llamamos realidad y quizás eso te haga sentir pequeño pero tu realidad difiere de la de otros por eso la generalización para aferrarte a un dogma y de ahí juzgar las obras hace este análisis pequeño y a su vez incompleto. Los tintes machistas propios de una época situarian a la misma Eva Perón en el mismo machismo, y no permitirían la resignificacion que en el presente se le da a su lucha por más que se haya codeado con el fascismo de hombres contemporáneos. El libro que Cortázar antes de morir escribe con su pareja habla de sus machismos por si también te interesa.

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