El bosque nativo de la provincia de Entre Ríos fue declarado en emergencia ambiental

Ante la denuncia de la acelerada extinción de especies animales y vegetales en el bosque nativo de Entre Ríos, el gobierno provincial decretó la emergencia ambiental y ordenó detener la tala rasa en los montes naturales y las selvas ribereñas, tanto públicas como privadas.
Por Daniela Capano

(AUNO*) La decisión está contenida en el decreto 4519 que prevé para los infractores severas sanciones que incluyen la expropiación de tierras y de las maquinarias utilizadas en el desmonte.
Las autoridades provinciales fueron alertadas por 300 profesionales que denunciaron durante un foro nacional de desarrollo sustentable realizado en Oro Verde, a quince kilómetros de Paraná que sólo quedan en toda la provincia entre un millón y ochocientas mil hectáreas de monte considerado virgen.
Los especialistas indicaron que la tala irracional de los últimos años provocó el desmonte de cerca de 1,2 millones de hectáreas por el avance agigantado de los cultivos de soja.
“La provincia tiene más de cuatro millones de hectáreas con riesgo cierto de erosión, y si desmontamos, aceleraremos el proceso”, señaló el secretario de Agricultura de la provincia, Sergio Vinacur. “La emergencia ambiental es real manifestó el funcionario y la prohibición es total: no se podrán talar árboles del monte nativo ni de las selvas ribereñas, y vamos a quintuplicar los controles”.
Vinacur explicó que en Entre Ríos siempre hubo tala, pero, según aseguró, en los últimos años “se comprobó una acción desmedida” que destruirá inexorablemente los recursos vegetales y animales y degradará el suelo.
Los departamentos La Paz, Villaguay, Feliciano y Federal, donde se recluyó el espinal después de un siglo de desmontes, fueron los más presionados por las topadoras en este lustro. La práctica consiste en arrancar de cuajo ejemplares centenarios, amontonarlos y quemarlos, para dar lugar a la agricultura. “El 30 por ciento de la gente que cultiva pertenece a pools (grupos rotativos) de siembra foráneos, y cuando esos campos se erosionen, se van a ir a otra parte y nos van a dejar un desierto”, advirtió Vinacur.
Entre los animales con mayor riesgo de extinción en la provincia a raíz de estas situaciones se cuentan el lobito de río, los hurones, el aguará guazú, el gato del pajonal, la comadreja colorada, las mulitas, el osito lavador, el cardenal amarillo y el yacaré ñato, que son algunos de los que perdieron su hábitat debido a la desaparición de los montes.
AUNO 07-10-03 MAR DC

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