Lomas de Zamora, marzo 22 (AUNO).- Después de ser seleccionados para representar al Conurbano Sur en la Fiesta Provincial de Teatro Independiente, parte del elenco del grupo “Teatreros” charló con AUNO en el teatro Nobles Bestias, la sala que los vio consagrarse entre otros diez compañías de la zona. “La dificultad que viene teniendo el teatro independiente es lo que cuesta traer a la gente a ver teatro. Hay gente que jamás fue a ver una obra de teatro en su vida y vive a dos cuadras de una sala como esta”, analiza Florencia Sena.
El círculo de actores y actrices armado en el bar del teatro se cierra alrededor de haber vivido un encuentro que fue un éxito no sólo de convocatoria, de las fuentes de inspiración de los textos que interpretaron, de su participación en la escena del teatro under, del rol de los encuentros en el circuito artístico, de la materia inagotable que cimenta sus obras: el amor.
Es que “Del polvo de tus dedos”, la creación colectiva que escribieron Pía Della Paolera, Camila Arechabala, Malena Benavidez Álvarez, Rocío Figueredo, Guillermo Llaurado, Florencia Sena y Jazmín Spanarelli bajo la dirección de Alfredo Badalamenti, se dispara a partir de un trunco amor adolescente que se traduce en magia y resucita un pueblo rural en plena decadencia.
“Comenzamos un taller con Alfredo Badalamenti acá en Nobles Bestias y nos pusimos a buscar leyendas populares que nos inspiren”, cuenta Camila. “Entonces –continua Roció- encontramos un mito de una mujer de Hinojo, un pueblo cerca de Bahía Blanca quien, según dicen, tuvo un amorío con un policía cuando tenía quince años. Como los padres se lo prohibieron, ella se metió en la cama y nunca salió. La familia la abandonó, ella quedó sola a punto tal que los vecinos tuvieron que hacer un agujero en la pared para alimentarla. La leyenda cuenta que quienes la vieron antes de morir juraban que tenía el mismo cuerpo y la misma cara que a los quince. La historia era muy teatral, muy mágica, y nos inventamos un pueblo y un personaje a partir de eso.
– ¿Con qué expectativas habían llegado al encuentro?
Jazmin: -Vi todas las obras del Encuentro y me inclinaba por “Ocho veces te dejo” y otra más. Cuando nos dijeron que habíamos sido seleccionados fue increíble.
Guillermo: -Ese no ir con expectativas de ganar nos favoreció porque nos puso en una situación de venir a divertirnos, sin presiones.
Rocío: -Estaba bueno compartirlo con gente, el día que pasó dijimos “bueno, la última vez que la hacemos, chicos…” Fue la vez que más nos divertimos, no tuvimos ningún tipo de presión y sentimos una soltura genial.
– ¿Por qué creen que el jurado eligió sus obras?
Rocío: –Quizás por cómo la obra aborda los vínculos humanos, que es un tema universal y muy fuerte. Se produce una identificación con estos personajes tan comunes, tan de pueblo, a pesar de que se desarrolla en un universo bastante imaginario y después vemos cómo de repente se modifican los vínculos por los golpes de factores externos. Todo se van degradando hasta un punto que no se sabe qué va a pasar.
-¿Cómo se imaginan la experiencia del provincial?
Jazmín: -Creo que se tratará de seguir compartiendo y seguir conociendo gente. A esta altura, el hecho de haber llegado a esa instancia ya es algo espectacular. De acá en más, más allá de que uno ansía ganar y seguir para progresar por uno y por el trabajo, el hecho de compartir, de estar con gente, de poder tener cinco días para mirar obras de teatro y que haya gente que apoye eso, creo que es maravilloso. Disfrutás simplemente de eso.
-Es moneda corriente escuchar que en el teatro independiente hay cada vez más alumnos y menos espectadores. Después de pasar por un festival como el regional, ¿aumenta el público?
Rocío: -Nos pasa que hay funciones con muy poca gente, pero que sale maravillada y nos dice“¡me encanta, me encanta!”. Eso te hace creer que la próxima va a haber más gente, pero en la función siguiente otra vez hay pocas personas… Le pasó al grupo de acá que participó en el festival anterior, que también tuvo mucha convocatoria con su obra “Postales Argentinas”, y sin embargo después del festival tuvieron funciones con poco público. Otra cosa que pasa es que, por ejemplo, cuando vamos a un bar o un lugar chico a hacer concert, en un buen día vienen unas 60 personas, y cuando hacemos lo mismo pero en la sala de Nobles Bestias, un lugar apto, con luces, ambiente, acústica, vienen cinco. Yo creo que sienten presión, en un bar te podés ir, en un teatro, no.
Pía: -Lo que te da el festival es la posibilidad de ir a un teatro, instalarte y ver cuatro obras con diferencia de una hora. Entonces venís y por 60 pesos ves tres obras, una totalmente distinta a la otra, que en el año no podés ir a ver porque están en el mismo horario, o en diferentes fechas, o porque no se hace más, o lo que sea. El festival se llena, probablemente, por esa oferta.
Florencia: -La dificultad que viene teniendo el teatro independiente es lo que cuesta traer a la gente a ver teatro. Hay gente que jamás fue a ver una obra de teatro en su vida y vive a dos cuadras de una sala como esta.
-Qué cambios les produjo el haber participado del festival?
Camila: –Como que ahora uno toma el trabajo desde otro lugar. Fue también un mimo a la autoestima y te da muchísimas más ganas. A veces hacemos funciones acá y viene poca gente y eso nos tira un poco para abajo. Que de repente el festival haya tenido tanta convocatoria y que nos digan que vamos al provincial nos pone de vuelta en carrera.
Rocio: -A nosotros, que no íbamos con la actitud de ganar, nos había motivado el hecho de que iba a haber un crítico que nos iba a hacer una devolución de la obra. Como prácticamente veníamos actuando ante el mismo público, su palabra nos interesaba muchísimo porque sabíamos que nos iba a hacer crecer y, la verdad, nos sirvió mucho. Además, las devoluciones que nos dieron, toda la gente que vino, actuar ante gente que nunca nos vio, que no es de ver teatro, nos sirvió a todos.
Jazmín: -Hay muchas propuesta de Teatro independiente y nosotros mismos no estamos en contacto con toda la oferta. “Ocho veces te dejo” no la había visto hasta que la vi acá, por ejemplo. Y también el festival sirvió para relacionarnos entre todos, saber que formamos parte de algo.
Sólo algunas de las veinte compañías seleccionadas accederán al definitivo Festival Nacional de Teatro Independiente que tendrá sede en las alturas jujeñas. Será tiempo, hasta que en la sala se pida silencio y se apaguen las luces, de cultivar el sueño aunque sea inconsciente y de prepararse para una salida distinta.
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